Trump "juega" para el enemigo

¿A qué juega Donald Trump?, se preguntan muchos (foto: EPA)
¿A qué juega Donald Trump?, se preguntan muchos (foto: EPA)

    (ANSA) - NUEVA YORK, 28 JUL - La presencia del ex presidente estadounidense Donald Trump y de su hijo Eric en el tercer torneo de la flamante Superliga árabe de golf representa una "provocación" y un mensaje político que va más allá del deporte, considera la prensa local encabezada por el "New York Times".
    "Trump abraza la LIV Golf favoreciendo una nueva estrategia saudita", afirma el periódico al considerar "después de años de fracasos y rechazos en el deporte", el ex mandatario "albergará un torneo de la Superliga", lo que representa "un mensaje que va más allá del golf y resulta por demás provocador".
    La decisión de tomar partido en favor de la LIV Golf, financiada por el fondo soberano saudita, en la disputa con el circuito estadounidense, el PGA Tour, y albergar un torneo en su propio National Golf Club en Bedminster, Nueva Jersey, también generó el repudio de los familiares de las víctimas de los atentados del 11 de septiembre de 2001, quienes consideran que Arabia Saudita intenta "aprovecharse del deporte para lavar su imagen de país terrorista".
    Trump, quien recientemente invitó a los grandes campeones del golf a sumarse a la Superliga árabe y aceptar sus ofertas millonarias, dio un paso más allá ahora a sólo 13 días de la cumbre en Jeda entre su sucesor en el cargo, Joe Biden, y el príncipe heredero al trono saudita, Mohammed bin Salman.
    Una visita durante la cual el actual mandatario estadounidense, a pesar de los protocolos, se animó a preguntarle a su anfitrión sobre el asesinato del periodista Jamal Kashoggi y recibió como respuesta un "No, no estamos involucrados con ese crimen y Estados Unidos no debe interferir".
    La decisión de Trump de albergar un torneo que convoca a grandes figuras como Dustin Johnson y Bryson DeChambeau, dos de los varios que optaron por pegar el salto a la Superliga árabe, es considerada por algunos analista como una venganza hacia el PGA estadounidense que en enero de 2021, tras el asalto al Capitolio, decidió organizar el PGA Championship de este año en Tulsa, Oklahoma, en lugar de hacerlo en Bedminster.
    Pensar que Trump soñaba con crear su propia Superliga en los años '80, "The Donald", con un campeonato paralelo que intentaba competir con la poderosa National Football League (NFL), en la que militaban algunos de los que él mismo repudiaba porque decidieron imitar a Colin Kaepernick, pionero en esa singular manera de protestar contra la violencia policial hacia los afro-estadounidenses arrodillándose cada vez que sonaba el himno nacional.
    Pero el proyecto de Trump, quien en 1984 adquirió una franquicia de la USFL, la Liga juvenil que se disputaba durante el receso de la NFL, terminó finalmente en un rotundo fracaso. (ANSA).