GUATEMALA, 25 (ANSA)- El comediante de TV, el derechista
Jimmy Morales, se convirtió hoy en el presidente de Guatemala al
imponerse ampliamente en segunda vuelta a la ex primera dama
socialdemócrata Sandra Torres. Morales, de 46 años y candidato del Frente de Convergencia
Nacional (FCN), conquistaba el 69,31% de los votos, cuando se
escrutaba el 93,54% de las mesas, según los últimos datos del
Tribunal Supremo Electoral de Guatemala, mientras que Torres
lograba el 30,69% de los sufragios. El nuevo presidente, que estuvo en TV 15 años ininterrumpidos
con su programa "Moralejas", no tienen ningún tipo de
experiencia en la función pública y esa es, según las encuestas,
una de las principales razones por las cuales recibe el apoyo
del electorado. En 2011 había perdido la elección como alcalde del municipio
de Mixco, uno de los más grandes de Guatemala, derrotado por
Otto Pérez Leal, hijo del ex presidente Otto Pérez Molina. Con su lema "ni corrupto, ni ladrón", Morales representó la
frustración de millones de ciudadanos después de una serie de
investigaciones que llevaron a la dimisión y arresto del ex
presidente Otto Pérez Molina en septiembre, acusado de dirigir
una millonaria estafa aduanera. "Yo no me confío. De niño me enseñaron que los regalos se
abren hasta las 12 de la noche. Así que si Dios nos da la
bendición de servir para mí será un privilegio", dijo Morales
durante la campaña. Este domingo acudió a votar con una camiseta del seleccionado
nacional de fútbol en su ciudad natal de Mixco, cerca de la
capital. Amparado acaso en sus estudios en teología, Morales supo
conquistar al electorado con discursos plagados de parábolas
bíblicas y chistes populares que entremezclaba con su historia
de niño humilde. A diferencia del vencedor que casi no presentó programa de
gobierno, Torres presentó un exhaustivo plan en el que prometió
profundizar los programas sociales para la mayoría pobre del
país que ella misma diseñó durante el mandato de su ex esposo
Alvaro Colom, del que se divorció en 2011 para poder lanzarse a
la presidencia. El nuevo mandatario asumirá en enero y se encontrará con un
país con persistentes desigualdades sociales y más de la mitad
de la población bajo la línea de pobreza. Las elecciones de Guatemala estuvieron marcadas por el
escándalo de corrupción que provocó la renuncia justamente del
presidente Otto Pérez, el 2 de septiembre pasado. El mandatario renunció cuatro días antes de la primera ronda
electoral.
ADG-MAC/ACZ
26/10/2015 03:56
|