Por Alberto Ferrari
BUENOS AIRES, 14(ANSA)- El gasto mundial en medicamentos
oncológicos supera actualmente el Producto Bruto Interno (PBI)
de 123 países y para 2018 resultará mayor a por lo menos al de
150 naciones, aseguró el economista argentino especializado en
temas de la salud, Federico Tobar, experto en las denominadas
"enfermedades catastróficas". Tobar comparó el PBI de los países, según datos del Banco
Mundial, con la facturación de los medicamentos oncológicos
declarada por la consultora internacional IMS Health, para
sostener su conclusión. El gasto mundial en medicamentos oncológicos fue de
75.621.858.322.843 dólares en 2013, de los cuales a
Latinoamérica y el Caribe le correspondieron 6.158.278.891.980. Entre los países latinoamericanos, Brasil con
2.245.673.032.354, México con 1.260.914.660.977 dólares y
Argentina con 609.888.971.036, fueron los que más gastaron en
medicamentos oncológicos durante 2013, muy por encima del gasto
de Suecia, Noruega, Dinamarca y Finlandia, por ejemplo.
En cambio Chile, entre los latinoamericanos, gastó en
oncológicos 277.198.774.857 dólares, casi similar a Finlandia,
con 267.328.613.728 dólares.
Tobar en su ensayo ""Cobertura de Enfermedades Catastróficas
como Política de Estado" apuntó que alrededor de 400 mil hogares
argentinos (equivalente a dos millones de personas) "cayeron en
la pobreza porque uno de sus miembros padece una enfermedad muy
costosa". Estas cifras se basan en el análisis de la Encuesta Nacional
de Utilización y Gasto en Salud del ministerio de Salud de
Argentina.
Los medicamentos de alto costo se han convertido en una
pesadilla para todos los países de América Latina que a través
de Unasur pidieron durante la reciente Asamblea General de la
Organización Mundial de la Salud (OMS) que se adopten medidas
conjuntas de contención de lo que definieron como "abusos del
mercado".
Las enfermedades de alto costo o "catastróficas" como las
define la OMS, son un conjunto reducido de patologías entre las
que se destacan las oncológicas, las hemofilias y la
enfermedades "poco frecuentes". "Para quienes no tienen cobertura de obras sociales o
prepagas o no tienen los recursos como para contratar un abogado
que inicie la demanda, el acceso a estos tratamientos es muy
inferior", advirtió Tobar, asesor regional para América Latina y
el Caribe del Fondo de Población de Naciones Unidas. Estas enfermedades afectan a los sistemas de salud, porque
sus gastos "crecen como un tumor que invade todos los órganos y
no permite que el cuerpo funcione bien", comparó.
Las enfermedades de alto costo requieren un uso intensivo de
nuevas tecnologías, en particular de medicamentos
biotecnológicos, cuyas ventas en el mundo crecieron el doble que
la venta de medicamentos en general.
En la Argentina, además, estos medicamentos se venden más
caros que en Europa e incluso que en Chile y Brasil, alertó
Tobar.
Los medicamentos biotecnológicos para el tratamiento de la
enfermedad De Gaucher pueden costar más de cuatro millones de
dólares al año, precisó.
Algunos países latinoamericanos, como Uruguay, Chile, Brasil
y Colombia han adoptado medidas para garantizar la cobertura
universal de las enfermedades catastróficas y, al mismo tiempo,
regular el mercado. Uruguay posee el Fondo Nacional de Recursos (FNR) que
garantiza la cobertura universal y "equitativa" de las
enfermedades catastrófica, definiendo cobertura y financiamiento
de las prestaciones. Colombia autorizó a fines del año pasado por decreto
presidencial el registro de biosimilares y desde 2013 tiene un
sistema de "precios de referencia" con otros países
latinoamericanos y europeos, para fijar precios máximos para los
medicamentos de alto costo. Chile también adoptó un seguro para enfermedades
catastróficas (CAEC) y Brasil dispone de una Comisión de
Evaluación de Tecnologías (CITEC) que define que puede ingresar
al mercado y debe financiar el Estado, detalla el ensayo
recientemente publicado en Argentina.
AEF-ADG/MRZ
14/06/2015 20:38
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