BUENOS AIRES, 14 (ANSA)- Treinta años después del inicio de
la epidemia de sida, la desaprobación social es aún uno de los
principales obstáculos para que las mujeres accedan al
tratamiento adecuado, así como para el diagnóstico y la
prevención, reveló un estudio realizado en América Latina,
Europa, China y Canadá. La investigación bautizada "Estudio ELLA" demostró que, pese
a la disponibilidad de terapias antirretrovirales efectivas y al
amplio esfuerzo por controlar la epidemia, persisten obstáculos
que dificultan el tratamiento luego del diagnóstico, que son
particularmente gravosos para las mujeres.
En el mundo existen al menos 35 millones de personas con VIH,
de las cuales la mitad son mujeres, calculó el estudio. El "Estudio ELLA" incluyó a más de 1.900 pacientes mujeres de
las cuales 519 eran latinoamericanas y más de un centenar
argentinas. Una de las conclusiones de la encuesta en Latinoamérica fue
que "son frecuentes la estigmatización, la falta de recursos y
las dudas sobre la salud reproductiva" entre las mujeres con
sida. Los datos globales del "Estudio ELLA" y los específicos de
Latinoamérica fueron presentados en el 15to.Congreso de la
Sociedad Argentina de Infectología (SADI), que se realizó
recientemente en la Ciudad de Buenos Aires.
Isabel Cassetti, médica infectóloga directora médica de Helios
Salud y una de las investigadoras del estudio, explicó que "el
estigma, la discriminación y los problemas laborales son
las barreras más importantes en el acceso al sistema de salud".
"Al acceder poco, esas mujeres inician el tratamiento más
tarde y además no concurren periódicamente al médico para
realizar los controles", detalló Cassetti.
Si se sigue en forma adecuada el tratamiento y se asiste a las
consultas programadas, el pronóstico para los pacientes es muy
bueno: "la sobrevida de una persona con infección por VIH es
igual que la de una persona sin el virus, siempre y cuando
cumpla adecuadamente con el tratamiento y realice todos sus
controles", comentó la especialista. El estudio reconoció que "mundialmente se implementaron
campañas de prevención y tratamiento destinadas a las
poblaciones de mayor riesgo".
"Sin embargo, los resultados del estudio indican que las
barreras a la atención continúan siendo frecuentes y
significativas, inclusive en aquellas pacientes que ya tienen
acceso a un tratamiento", comparó.
Los principales impedimentos fueron la estigmatización, la
falta de oportunidades laborales y apoyo en el trabajo, y la
escasez de recursos personales.
Las mujeres encuestadas a nivel mundial tenían, en promedio,
40 años y habían sido diagnosticadas hacía nueve años
aproximadamente. Ocho de cada 10 vive en áreas urbanas y la
mitad tiene empleo.
En lo que respecta a Latinoamérica, el estudio indicó que el
96,7% de las 519 encuestadas había adquirido VIH mediante
contacto sexual, el 54,4% había sido diagnosticada hacía más de
cinco años y el 87,3% se encontraba bajo tratamiento
antirretroviral. En la región, las mayores barreras en el acceso a la atención
reportadas fueron, como a nivel mundial, la estigma por parte de
la comunidad y falta de recursos personales.
Al indagar sobre las estrategias para prevenir el embarazo
que utilizaban las mujeres encuestadas, se detectó que las
opciones más elegidas eran: cirugía en la mujer, preservativo y
abstinencia, mientras que el 17% de las mujeres manifestó su
deseo de tener otro hijo.
"Existe una necesidad aún insatisfecha, que es la de asesorar
a la mujer acerca de las opciones de embarazo y, en un sentido
más amplio, es acerca de la salud reproductiva, es decir,
preparar a esa mujer para planificar un embarazo si lo desea y
asesorarla en las medidas a tomar si no lo desea", concluyó
Cassetti.
AEF-ADG/MRZ
14/06/2015 21:44
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