<newslink
iptc="01000000">
</newslink> BUENOS AIRES, 16 (ANSA)- La célebre pianista argentina Martha
Argerich ofrecerá mañana un concierto gratuito en el cual
interpretará obras de sus compatriotas Astor Piazzolla y Luis
Vacalov, junto a la Orquesta Sinfónica Nacional, en el Centro
Cultural Néstor Kirchner de Buenos AIres.
También participará el pianista y compositor Vacalov, quien
interpretará "Il Postino", tema central del filme homónimo sobre
el poeta Pablo Neruda que ganó un Oscar en 1996 como mejor
música original para una película. Argerich acordó con su colega Eduardo Hubert el programa que
se interpretará -durante dos horas- en la Sala Ballena Azul, con
capacidad para 1.750 personas. La expectativa prevista que despertó la actuación de
Argerich, radicada hace décadas en Bruselas, Bélgica, quedó
reflejado en los más de 1,2 millones de ingresos al sitio web
para obtener una entrada gratuita. El público podrá seguir el concierto mediante pantallas
gigantes HD y con sonido de alta fidelidad que se instalarán en
el exterior del Centro y en las salas Argentina y La Cúpula. También será transmitido a todo el país, en directo, por
Canal 7, la televisión pública, y en Radio Nacional Clásica. La artista, considerada una de las mayores conocedoras en el
mundo de la obra de Mozart, ejecutará de Piazzolla "Tres minutos
de la realidad", junto a un grupo de cuerdas, y "Oblivion", a
dos pianos con Hubert, además de "Porteña", obra para dos pianos
y orquesta de Vacalov dedicada a Argerich. El programa incluye además "Fauretango" de Hubert, "Il
Postino" y "Astoreando" de Vacalov, autor de bandas sonoras de
películas como "Django", "Il grande duelo" y "Il prezzo del
potere". Conocida por elegir con mucho rigor sus actuaciones, Argerich
tocará además los días 26, 29 y 30 de julio próximos en el
Teatro Colón, junto a su amigo Daniel Barenboim al frente de la
Orquesta West-Eastern Divan. Argerich nació en Buenos Aires en 1941, el mismo año que su
amigo y colega Bruno Gelber, y al año siguiente que Barenboim.
Los tres se formaron en la infancia con maestros como Vicente
Scaramuzza o sus propios padres en la ciudad de Buenos Aires. Del maestro italiano, famoso por el trato impiadoso con sus
alumnos, Argerich recordó -en su visita del año pasado- que los
llamaba "cretinos", que la batuta era además un "arma"; pero
destacó en forma categórica: "nos enseño un rigor que es
importantísimo".
AGR/ACZ
16/07/2015 22:07
|