BUENOS AIRES, 13 (ANSA) - Varios miles de afectados y
evacuados causó el temporal que desde hace una semana azota el
norte de la provincia de Buenos Aires y el sur de Santa fe,
mientras se esperan nuevas lluvias y rige el alerta de
"sudestada". El gobierno de la provincia de Buenos Aires informó hoy que
son 10 mil los afectados y 2.000 los evacuados, tras el desborde
de ríos por las lluvias caídas en una semana que, en algunas
zonas, sumaron 200 mm, un quinto de lo que llueve en el año. También hay 2.400 personas que se evacuaron por sus propios
medios. Daniel Scioli, gobernador provincial, volvió hoy a declarar
la emergencia hídrica y lo anunció en una conferencia de prensa,
tras un viaje "informal" a Roma por algunas unas horas. La medida anunciada en la ciudad de La Plata, capital de la
provincia, distante 60 kilómetros de Buenos Aires, prevé la
exención de impuestos de agua, luz y otros servicios esenciales
de las zonas afectadas. Mientras que la Dirección de Emergencias Sanitarias estimó en
30 mil la cifra total de personas involucradas en el fenómeno
meteorológico,
Las cuencas de los ríos Luján, Areco y Salado tienen una
tendencia a la baja, informaron autoridades provinciales, aunque
el pronóstico para las próximas horas es de más lluvias y
sudestada (viento del sureste que causa marejadas que elevan el
nivel del agua y frena el cauce de ríos hacia la desembocadura
en el Río de La Plata).
El Servicio Meteorológico Nacional dio un parte hoy según el
cual "un sistema de baja presión ubicado sobre el norte de la
República Oriental del Uruguay provoca lluvias de intensidad
moderada, por momentos fuertes, sobre la zona de cobertura". "Las condiciones del tiempo mejorarán durante la mañana del
viernes 14", aseguró. El tránsito por las zonas afectadas se complica dado que
están cortadas cinco carreteras en el norte de Buenos Aires y el
sur de Santa Fe (Litoral) ante el desborde de los ríos. El desborde del río Luján dejó a la Basílica de Nuestra
Señora de Luján, patrona de Argentina y distante 67 kilómetros
de la capital del país, con el agua en la puerta del imponente
templo del fin del siglo XIX. Personal militar de Prefectura, el Ejército y Prefectura
Naval fueron desplegados en las áreas críticas para desarrollar
tareas de asistencia a los damnificados. Las imágenes dramáticas de miles de familias obligadas a
abandonar sus viviendas, usando incluso embarcaciones de
plástico o canoas para desplazarse por las calles, movilizaron
además a numerosas organizaciones solidarias, que comenzaron a
recolectar ayuda.
AGR/ACZ
13/08/2015 20:42
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