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BUENOS AIRES, 24 (ANSA)- Sergio Massa, el tercer candidato
con posibilidades de acceder a la presidencia de Argentina,
expresa a los sectores del peronismo que se apartaron del
oficialismo en 2013 e intenta sintetizar "el cambio justo" entre
el ciclo kirchnerista que toca a su fin y la demanda de
transparencia institucional que reclama la sociedad.
Massa comenzó a militar en su adolescencia en la Unión de
Centro Democrático (Ucedé), partido liberal-conservador que
alcanzó su plenitud en la década del 90 cuando sus principales
dirigentes se sumaron al modelo privatizador del presidente
Carlos Menem (1989-1999).
El candidato del Frente UNA (Unidos por una Nueva Argentina)
se pasó al peronismo a los 22 años, como militante en el
municipio de San Martín (20 kilómetros al oeste de la capital
argentina) con el patrocinio de la actual diputada nacional
Graciela Camaño, peronista ortodoxa y su jefa de campaña
presidencial.
Massa durante el gobierno provisional de Eduardo Duhalde
(2002-2003) asumió la dirección de la Administración Nacional de
la Seguridad Social (Anses), estratégico organismo que controla
los aportes de la seguridad social y distribuye ayuda social.
En 2005 fue electo diputado nacional pero siguió al frente de
la Anses, hasta que en 2007 fue elegido intendente de la
Municipalidad de Tigre (40 kilómetros al norte de Buenos Aires)
donde pudo consolidar su imagen de administrador eficaz y
hacedor de obras públicas.
El siguiente escalón fue la Jefatura de Gabinete del primer
gobierno de Cristina Fernández en 2008, pero un año después
renunció al cargo ya en disidencia con el matrimonio Kirchner y
reasumió como intendente (alcalde) de Tigre.
Massa fue construyendo su proyecto político disidente del
kirchnerismo pero sin romper amarras con la estructura del
partido peronista hasta 2013, cuando se presentó como candidato
a diputado nacional y derrotó al oficialismo en la estratégica
provincia de Buenos Aires.
La victoria de Massa en 2013 se desparramó al resto del país
y sumó a peronistas opositores al gobierno de Cristina
Fernández, proyectándose, por entonces, como el candidato mas
temible para el oficialismo.
En aquellos días, decenas de dirigentes de base del conurbano
bonaerense (conocidos como "punteros") se sumaron a sus filas,
nutridas también por profesionales de prestigio como el ex
ministro de Economía Roberto Lavagna, el hombre que piloteó la
economía del país desde la crisis del 2002 a la renegociación de
la deuda externa a fines de 2005.
Sin embargo, en las elecciones primarias PASO de agosto
pasado finalizó tercero, a casi veinte puntos del candidato
oficialista Daniel Scioli y presionado para que abandonara su
candidatura para que la oposición se encolumnara detrás de un
único candidato, Mauricio Macri.
Massa no solo persiste en su candidatura, sino que además
apunta a capturar el voto opositor que hoy divide con Mauricio
Macri, pues su única posibilidad de acceder a la presidencia es
competir con Scioli en una segunda vuelta electoral, en
noviembre venidero.
A los 43 años, Massa es el candidato más joven de los tres
con posibilidades de acceder a la presidencia y al igual que sus
rivales obtuvo el diploma de grado en una universidad privada.
Massa completó su carrera de abogado en julio de 2013 en la
Universidad de Belgrano, de la capital de Argentina.
El candidato opositor está casado desde 2001 con Malena
Galmarini, con quien tiene dos hijos, Milagros (13) y Tomas
(10). Malena es hija de un matrimonio que militó en la
organización Montoneros en la década del 70 y su padre estuvo
desaparecido durante varios meses en 1977.
En la década del 90, su padre, Fernando "Pato" Galmarini, fue
secretario de Deportes de la presidencia de Menem.
AEF-ADG/MRZ
24/10/2015 17:03
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