(ANSA) - BUENOS AIRES, 15 MAR - El presidente argentino, Mauricio Macri, confió hoy en que el Congreso aprobará su propuesta de acuerdo con los holdouts (llamados "fondos buitre") o de lo contrario el país "va a seguir en el fondo de la tabla de aquellos (países) que no son confiables y no son creíbles".
    Las declaraciones de Macri coincidieron con el inicio del maratónico debate en la Cámara de Diputados del proyecto que autoriza a endeudarse para pagar alrededor de 12 mil millones de dólares al contado a los "fondos buitre", que demandaron al país ante la justicia de Nueva York. Macri, en declaraciones a Radio2 de Rosario, afirmó que "si no resolvemos este bendito conflicto mal encarado, mal resuelto, mal ocultado, vamos a seguir en el fondo, pero en el fondo de la tabla de aquellos que no son confiables, que no son creíbles, no pertenecen al mundo activamente, se les impide crecer". El legislador oficialista, Luciano Laspina, titular de la comisión de Presupuesto de Diputados, al defender el proyecto impulsado por el Poder Ejecutivo, aseguró que el Congreso "tiene en sus manos una decisión trascendente para los argentinos que puede poner fin a una saga que llevó a una situación insólita al país".
    Laspina aseguró que Argentina, durante la década pasada, consumió "unos 55 mil millones en pago a acreedores externos y hoy mantiene la casi totalidad de la deuda y ha pulverizado el crédito público necesario para realizar obras que faltan en el país".
    El legislador del partido de gobierno PRO sostuvo que "no es cuestión de buscar culpables en el pasado sino buscar soluciones" y aseguró que el gobierno de Mauricio Macri "no vino para sacarse de encima las responsabilidades sino a traer soluciones".
    Según el diputado, "estamos ante un litigio de una enorme complejidad, más de 150 bonos de diferentes monedas y jurisdicciones" y aseguró que con este acuerdo se logrará "recuperar la palabra del gobierno argentino".
    El diputado nacional kirchnerista y ex ministro de Economía, Axel Kicillof, aseguró que votar el proyecto de acuerdo con los holdouts es "una rendición incondicional ante los fondos buitres" y volvió alertar sobre la posibilidad de nuevos litigios de los bonistas que ingresaron en los canjes 2005 y 2010.
    Al exponer durante el debate parlamentario, Kicillof planteó que este acuerdo "traerá más problemas a la Argentina y en lugar de pagar 20.000 millones de dólares, como dice el Gobierno que hará ahora, terminaremos pagando 200.000 millones de dólares.
    El diputado Marco Lavagna del Frente Renovador (peronismo ortodoxo) admitió que "no podemos sentirnos orgullosos" de discutir un acuerdo que "expresa una derrota para el país" y que se trata de un conflicto que "debió cerrar hace mucho".
    "Estamos negociando en una situación de desventaja, de apuro, en la que los riesgos legales nos dejan debilitados, pero algo tenemos que hacer porque quedarnos como hasta ahora es inviable", señaló el legislador, hijo de Roberto Lavagna, el ex ministro de Economía que en 2005 negoció el primer canje de deuda con sus acreedores externos.
    Lavagna también cuestionó el fallo del juez Thomas Griesa de Nueva York, porque "se extralimita y desde lo legal es indefendible", pero "tampoco podemos sentirnos víctimas" por los errores que adjudicó al gobierno de Cristina Fernández en la negociación con los "Fondos Buitre".
    Diego Bossio, ex funcionario de la presidenta Cristina Fernández y hoy dirigente de un bloque del peronismo cercano al gobierno de Macri, recordó que el gobierno anterior ya demostró su voluntad de pago al cancelar la deuda con el Club de Paris y la petrolera española Repsol, por la nacionalización de YPF.
    Bossio reconoció que los "fondos buitre" son "la peor lacra del sistema financiero internacional" pero que se ha tornado inevitable negociar "porque hemos sido derrotados" por los fallos de la justicia estadounidense. En consecuencia, anticipó que su bloque aprobará el proyecto oficial aunque mencionó varios artículos que pidió "profundizar" y advirtió que "hay que ponerle límite al endeudamiento". Las diputadas de centroizquierda Victoria Donda (Libres del Sur) y Alcira Argumedo (Proyecto del Sur) coincidieron en rechazar el proyecto de acuerdo con los holdouts.
    Donda pidió que se active la comisión bicameral de investigación de la deuda externa aprobada en la Cámara de Diputados durante el kirchnerismo, pero jamás puesta en práctica, solicitud que acompañó la socialista Alicia Ciciliani.
    La diputada Argumedo advirtió que existen "buitres no identificados" en Francia, España y Bélgica y "nada asegura que el arreglo con el grupo que accionó en los tribunales de Nueva York, no dispare exigencias de tenedores que entraron en los canjes de los años 2005 y 2010, con las gravísimas consecuencias que ello ocasionaría a la economía del país". Partidos de izquierda, militantes del kirchnerismo, la central sindical opositora CTA, organizaciones sociales y estudiantiles, marcharon hacia el Congreso para expresar su repudio al acuerdo. (ANSA). AEF-ADG/MRZ
15/03/2016 21:43