BRASILIA, 10 (ANSA) - El vicepresidente brasileño, Michel
Temer, dijo ante la mandataria Dilma Rousseff y ministros que el
país corre el riesgo de que la crisis se profundice hasta
alcanzar una gravedad similar a la que llevó al
hundimiento de Grecia. Temer recordó la semana pasada que el Congreso comenzó a
votar una serie de "proyectos bomba" que podrían derribar el
programa de ajuste para reencauzar la economía. "La pauta del Congreso podría transformar al país en una
Grecia", alertó el vicepresidente al explicar por qué llamó a la
unidad nacional y a buscar un dirigente que permita enfrentar la
crisis. La afirmación de Temer, del Partido Movimiento Democrático
Brasileño (PMDB), fue citada hoy por un comentarista de la
cadena Globo luego de hablar con ministros que participaron del
encuentro en el Palacio de Alvorada, residencia presidencial. En Alvorada estuvo el ministro de Hacienda, Joaquim Levy,
quien ha manifestado en el Senado y Diputados la necesidad de
que los congresistas den su voto a los proyectos del Ejecutivo
para recortar gastos e incrementar la recaudación. Michel Temer fue el primer funcionario que habló en la
reunión de gabinete extraordinaria convocada por Rousseff y
concluida casi en la medianoche de ayer en Brasilia. Las señales de que la crisis económica no da tregua fueron
reiteradas hoy por el mercado financiero que pronosticó una baja
del Producto Bruto Interno del 1,97 por ciento en 2015, mientras
la inflación subirá al 9,32 por ciento. Luego de la junta celebrada en la residencia el ministro de
Comunicaciones, Edinho Silva, dijo a periodistas que "no estamos
negando que haya dificultades, las reconocemos pero decimos que
serán superadas con el diálogo, la política es el arte de
dialogar". Rousseff "es optimista respecto de la capacidad de la
economía para responder en un corto tiempo a este momento de
dificultades", agregó Silva al resumir lo tratado luego de más
de tres horas de conversaciones coordinadas por Rousseff.
DCP/ACZ
10/08/2015 18:28
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