BRASILIA, 24 (ANSA)- El ministro de Hacienda brasileño,
Joaquim Levy, declaró que la economía no puede detenerse y
propuso proseguir con la política económica en curso, tema que
fue tratado en la noche de ayer durante una reunión de gabinete
encabezada por la presidenta Dilma Rousseff. "Si todo el mundo se queda asistiendo a ver que pasa es obvio
que el PBI va a caer, el PBI es un flujo, es la suma de lo que
uno hace todos los días", declaró el poderoso titular de la
cartera de Hacienda. "El país no puede parar, si uno empieza a postergar las
decisiones el PBI cae, y es allí cuando el costo del ajuste
termina siendo mayor de lo planeado", añadió Levy. Proyecciones publicadas por el Banco Central anticiparon que
el PBI caerá más del 2 por ciento este año y será apenas
negativo el próximo. La marcha del plan de ajuste y el proyecto de presupuesto
para 2016 fueron dos de los temas abordados ayer durante la
reunión de gabinete encabezada por Rousseff en el Palacio de
Alvorada, la residencia oficial en Brasilia. Las reuniones de trabajo los fines de semana se han vuelto
habituales debido a la tensión surgida de una crisis política y
económica que afecta al gobierno, cuya popularidad está debajo
del 10 por ciento y su rechazo supera el 70 por ciento. Este fin de semana el ministro de comunicaciones de la
Presidencia, Edinho Silva, respondió a un juez del Supremo
Tribunal Federal, Gilmar Mendes, quien manifestó sus sospechas
sobre el origen ilícito del dinero con que se financió la
campaña que condujo a la reelección de Rousseff en 2014.
(ANSA).
DCP/MRZ
24/08/2015 14:14
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