(ANSA)- BRASILIA, 10 DIC - La ministra de Agricultura de
Brasil, Katia Abreu, arrojó vino en la cara del senador José
Serra impulsor del impeachment, durante una cena de
legisladores, mientras diputados se fueron a las manos hoy en el
contexto de la tensión reinante debido al agravamiento de la
crisis política. Katia Abreu, amiga de la presidenta Dilma Rousseff, echó el
vino de su copa en la cara de José Serra cuando el senador
opositor, y ex candidato presidencial, le preguntó si era cierta
su presunta fama de ser "querendona". El incidente ocurrió en la noche del miércoles durante una
cena de senadores en la que uno de los invitados fue el
vicepresidente Michel Temer, considerado uno de los impulsores
del "impeachment". La ministra Abreu, que tiene licencia como senadora para
asumir el cargo en el gabinete, admitió hoy su discusión con
Serra, a quien llamó "infeliz, irrespetuoso, arrogante y
machista… usted nunca va a ser presidente". "Reaccioné a la altura de una mujer que defiende su honra",
declaró la funcionaria "dilmista" a la prensa mientras los
asesores de Serra anunciaron que no formularán comentarios sobre
el hecho.
Serra, del opositor Partido de la Socialdemocracia Brasileña,
se manifestó hoy a favor del juicio político y demostró estar
dispuesto a respaldar un gobierno de transición del
vicepresidente Temer. Entre tanto, diputados oficialistas y opositores se
insultaron y empujaron hoy durante una sesión en la que analizó
la apertura de un proceso contra el presidente de la Cámara
Baja, Eduardo Cunha, impulsor del enjuiciamiento de Rousseff. Los incidentes ocurrieron en la Comisión de Etica de la
Cámara baja donde se analizó la apertura de un proceso contra
Cunha, luego de que se le descubrieron más de cinco millones de
dólares ocultos en cuentas de bancos suizos. En medio de la sesión el diputado Ze Geraldo, del oficialista
Partido de los Trabajadores, insultó y empujó a su colega
Wellington Roberto, del opositor Partido Republicano. Según el parlamentario oficialista, "los seguidores del
diputado Cunha quieren causar revuelo" para dilatar su acusación
y buscar que la misma quede para después del receso
parlamentario que se inicia en dos semanas. "Nadie es tan macho como para golpearme" rebatió Wellington
Roberto visiblemente irritado con el petista Geraldo cuando
otros parlamentarios intercedieron para apaciguar los ánimos. Finalmente la sesión fue suspendida y con esto ya son seis
las reuniones en que fue diferida la decisión sobre un proceso
contra Cunha, considerado el diputado más poderoso del país. Cunha es sospechado de haber violado el decoro parlamentario
pues negó en una sesión legislativa ser el titular de cuentas
suizas en las que, según la Justicia helvética, ocultó dinero
que obtuvo de sobornos a empresas.
DCP/MRZ
10/12/2015 18:37
|