Por Darío Pignotti
(ANSA) - BRASILIA, 12 FEB - La presidenta brasileña Dilma
Rousseff encabeza el operativo "Zika Cero" contra el virus que
asola al país en el marco de una campaña que el gobierno asume
como una "causa nacional", según la definió hoy el ministro de
Salud, Marcelo Castro. Rousseff determinó que el combate al virus Zika sea la "gran
causa nacional", porque la acción que "moviliza a todo el país
para dar respuesta al virus es el mayor problema" de la nación,
afirmó el jefe de la cartera de Salud. La mandataria se trasladará este sábado a Rio de Janeiro para
observar personalmente las tareas que allí realizarán 70 mil
militares y miles de agentes sanitarios dentro de las acciones
previstas en el Día de Movilización Nacional contra el mosquito
aedes aegypti, vector del Zika. Se trata de una "batalla", afirmó Rousseff en cadena nacional
de radio y televisión, en la que participarán más de 500 mil
militares y civiles que visitarán 3 millones de domicilios de
los 27 estados de un país continental de 8,5 millones de
kilómetros cuadrados. Brasil es el país con mayor número de infectados de Zika en
el mundo, y se estima que si no se detiene la epidemia habrá 1,5
millones de pacientes, según proyecciones de la Organización
Mundial de la Salud (OMS). El gigante sudamericano ya sufrió tres muertes confirmadas
por Zika a lo que se suman 4.783 bebes afectados de
microcefalia, una desproporción en el tamaño de la cabeza, con
efectos sobre el sistema nervioso, enfermedad que posiblemente
es causada por ese virus. La opinión pública internacional observa con preocupación la
grave situación actual y los temores sobre lo que ocurrirá
durante los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro, en agosto
próximo. Está previsto que este mes visite Brasil la directora de la
OMS, Margaret Chan, y directivos de varias confederaciones
deportivas internacionales interesados en saber las medidas
previstas de cara a los Juegos Olímpicos. El lema "Zika Cero" desplegado en un amplio mural del Palacio
del Planalto durante una conferencia de prensa celebrada ayer
para lanzar el plan contra el flagelo, evoca al conocido "Hambre
Cero" que fue una de las marcas del gobierno de su
correligionario, el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva. Luego de asumir el protagonismo de la campaña contra el virus
Zika, la presidenta llevó adelante una nutrida agenda de
reuniones para obtener el apoyo de diversos sectores de la
sociedad civil como la Iglesia católica, empresarios, sindicatos
y entidades estudiantiles. "Zika Cero" fue también uno de los asuntos principales en su
discurso de apertura de las sesiones parlamentarias de la semana
pasada cuando fue abucheada por parte de los congresistas. Por cierto este conjunto de medidas contra la enfermedad es
también propicio para que Rousseff recupere el centro del
arenero político y mantenga la iniciativa de una agenda muy
crispada por las disputas con la oposición. Con esta campaña "Zika Cero" Rousseff arriesga la poca
credibilidad que le resta, que según encuestas está en el orden
del 10%. Y si lograra salir airosa de este primer examen aún le
restará enfrentar otro en agosto cuando se realizarán los Juegos
Olímpicos de Rio de Janeiro. Igual que ocurrió en el Mundial de fútbol de 2014, los meses
previos a la cita olímpica estarán signados por críticas
opositoras e interrogantes llegados desde exterior sobre las
garantías sanitarias que se darán a unos 10.000 atletas que
participarán en el evento. Deportistas estadounidenses y europeos admitieron esta semana
su temor a viajar a la Ciudad Maravillosa para los Juegos. Y trascendió que el Comité Olímpico norteamericano realizó
consultas informales con algunos atletas, versión que luego fue
parcialmente desmentida. Frente a ese clima de desconfianza internacional Rousseff
escogió a los ministros de Deporte y Defensa para que expresen
la posición del gobierno. "Definitivamente las Olimpíadas están garantizadas y serán un
gran evento… no hay nada que comprometa a este gran espectáculo"
afirmó el titular de Deportes Georges Hilton, en declaraciones
publicadas hoy por la estatal Agencia Brasil. "Con el esfuerzo que está haciendo el gobierno contra el Zika
no creo que las Olimpíadas pueden sufrir algún perjuicio…los
riesgos ocasionados por el mosquito no se restringen a Brasil"
planteó, por su parte, el ministro de Defensa Aldo Rebelo.
DCP/MRZ
12/02/2016 19:23
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