Por Darío Pignotti (ANSA)- BRASILIA, 4 MAR - La Policía Federal allanó hoy el domicilio y oficinas del ex presidente Luiz Lula da Silva quien fue interrogado durante horas mientras la Fiscalía anunció contar con "evidencias" que lo vinculan con la trama de corrupción en la petrolera estatal Petrobras.
    "No tengo nada que temer, porque no he hecho nada malo. Si los jueces me hubieran mandado a llamar hubiera ido, como lo hice el 5 de enero pasado en Brasilia", afirmó hoy Lula.
    De ese modo, "habrían evitado esta acción innecesaria y espectacular, este Show", añadió en la sede de su partido, el Partido de los Trabajadores, luego de que policías lo forzaran a que los acompañara a declarar en una investigación sobre supuestos sobornos.
    El ministerio Público Federal y la Policía Federal ofrecieron hoy una conferencia de prensa en la que aseguraron contar con "evidencias" sobre la participación de Lula con el esquema de corrupción conocido como el "Petrolao".
    Lula fue "beneficiado" por el "traspaso de unos 30 millones de reales (7,5 millones de dólares) aportados por las "empresas constructoras" que participaron en el tramado establecido en torno a Petrobras, afirmó el procurador Carlos Fernando dos Santos Lima, del "Grupo de Tareas" que trabaja en la causa "Lava Jato" ("Lavado Rápido").
    El proceso "Lavado Rápido" es conducido desde 2014 por el juez federal de primera instancia Sergio Moro, que ya detuvo y procesó a decenas de ejecutivos de las principales empresas constructoras, dirigentes del oficialista Partido de los Trabajadores y ex altos jerarcas del Petrobras que cobraron decenas de millones de dólares en sobornos. Lula declaró durante más de tres horas en la sede de la Policía Federal en el Aeropuerto de Congonhas, en el centro de San Pablo desde donde luego se dirigió al Directorio Nacional del Partido de los Trabajadores donde fue recibido por militantes y dirigentes.
    La Justicia emitió una orden de traslado "coercitivo" del ex gobernante, que en la práctica significa que éste no puede rehusarse a comparecer pero no significa una detención temporaria como la ordenada la semana pasada contra su publicista Joao Santana, que continúa preso.
    La Policía Federal de Brasil allanó hoy a las 6 horas (9 GMT)su residencia en San Bernardo do Campo y las oficinas del ex presidente Lula da Silva en el Instituto Lula, en el barrio Ipiranga, centro de la ciudad de San Pablo.
    Paralelamente fueron realizados allanamientos en los estados de San Pablo, Rio de Janeiro y Bahia, con órdenes de interrogatorios al hijo de Lula, Luis Claduio, y a Paulo Okamotto, titular del Instituto Lula y uno de sus colaboradores más cercanos desde hace décadas.
    "El 60% de las donaciones recibidas por Lula y el 47% de los pagos por las conferencias por él dadas son oriundos de esas cinco empresas que son el núcleo duro del cártel en Petrobras", aseguró Dos Santos Lima, ante numerosos periodistas en Curitiba, capital del estado sureño de Paraná.
    Consultado si Lula es considerado el jefe de la organización delictiva establecida en torno de Petrobras, el fiscal respondió que se "reunieron muchos elementos" contra el ex jefe de Estado entre 2003 y 2011.
    No obstante lo cual Dos Santos Lima sostuvo que "todavía no tenemos una conclusión, hay que revisar (los materiales secuestrados) y luego haremos la denuncia ante el juez" sobre Lula.
    El fiscal dijo estar informado sobre los choques entre simpatizantes y opositores a Lula y lamentó el hecho de que "Brasil está muy polarizado y hay un maniqueísmo entre los que están a favor y en contra" del dirigente petista.
    Hubo cruce de insultos y enfrentamientos en frente al departamento del ex gobernante en la ciudad de San Bernando do Campo, área metropolitana de San Pablo, y en menor grado también en el hall de la aeroestación de Congonhas.
    El procurador además se refirió a las averiguaciones sobre si Lula es el verdadero propietario de un departamento "Triplex" en la playa de Guarujá y de una casa de campo en Atibaia, ambas propiedades en el interior de San Pablo.
    Para el ministerio Público Federal las empresas OAS y Odebrecht financiaron de manera oculta la compra del departamento y arreglos en la casa de campo como parte de los "favores" con los que pagaron a Lula la obtención de contratos irregulares en Petrobras.
    Las diligencias contra Lula causaron un terremoto político y el opositor Partido de la Socialdemocracia Brasileña afirmó que esto afectará al gobierno y que "el gobierno de Dilma acabó".
    El jefe del bloque senadores socialdemócratas, Cassio Cunha Lima, declaró hoy que es necesario el llamado a "elecciones anticipadas" a raíz del agravamiento del escándalo en Petrobras.
    Por otra parte, el jurista Miguel Reale Júnior, ex ministro de Justicia durante el gobierno de Fernando Henrique Cardoso, dijo hoy que la imputación de Lula "afecta el proceso de impeachment" contra Rousseff.
    "La casa se cayó" dijo hoy Miguel Reale Junior es el autor del proyecto de impeachment contra Rousseff presentado por el PSDB en 2015. DCP-ADG/ACZ
04/03/2016 18:58