SANTIAGO DE CHILE, 27 (ANSA) – La justicia declaró culpable a
Jovino Novoa, ex subsecretario de la dictadura de Augusto
Pinochet y ex senador de la Unión Demócrata Independiente (UDI),
al comprobarse que emitió facturas falsas y descontó impuestos
en forma fraudulenta para financiar campañas electorales.
El ex hombre fuerte del partido político fundado por el
ideólogo de la dictadura, Jaime Guzmán, reconoció los hechos
para así acceder a un juicio abreviado que le permitirá no ir a
presidio e incluso poder volver a presentarse para un cargo de
elección popular.
El ex legislador emitió facturas falsas a las empresas Penta,
Banpenta y Penta III por servicios no prestados, con montos
previamente acordados por los también imputados en la causa de
fraude al Fisco Carlos Délano y Eugenio Lavín, dueños del
poderoso holding Penta. Novoa, a través de su firma Inversiones y Mandatos S.A.,
incorporó a la contabilidad boletas de terceros ideológicamente
falsas por servicios que nunca se prestaron a título de gastos
para así rebajar impuestos y destinar esos dineros a campañas
políticas. Por esos delitos, la Fiscalía pidió una pena de 3 años de
presidio menor en su grado medio, una multa correspondiente al
50% del perjuicio fiscal -correspondiente a 21.428 dólares-, y 5
Unidades Tributarias Anuales (3.873 dólares). A Novoa se le reconocieron tres atenuantes que tienen
relación con la reparación con celo del mal causado –tras haber
pagado los impuestos que había defraudado-, su irreprochable
conducta anterior y la colaboración sustancial a la
investigación tras declarar ante la Fiscalía. La defensa solicitó que la pena de su representado sea
cumplida de manera remitida, teniendo en cuenta su buen
comportamiento y comprometiendo que su cliente "no va a volver a
delinquir". La pena será conocida el próximo 2 de diciembre. Novoa evitó hacer declaraciones a la salida del juicio
abreviado que se prolongó por casi tres horas.
Sólo se limitó a señalar que "el proceso judicial no ha
concluido".
De acuerdo con la investigación judicial, el ex senador era
la persona que recibía los dineros de Penta y él decidía a que
candidato UDI se iba a apoyar. Novoa mantenía un estrecho círculo de control sobre el
partido pinochetista –conocido como los "coroneles"- e impedía
la renovación o el ascenso de nuevos liderazgos.
Cuando estalló el Caso Penta por una investigación del
Servicio de Impuestos Internos, primero se identificó a las
empresas comprometidas para más tarde derivar en la arista
política.
Al saltar el nombre de Novoa y su empresa, él negó
responsabilidades e hizo uso de su derecho a "guardar silencio"
ante la Fiscalía.
Luego presentó un certificado médico por una intervención
quirúrgica, pero en julio, tras prestar declaración, fue
formalizado y quedó con arresto domiciliario. La defensa del político decidió cambiar de estrategia y
ofreció colaboración, por lo que aceptó acogerse a un juicio
abreviado para lo cual debía reconocer su culpabilidad.
El partido de Novoa se negó siempre a legislar para
establecer un financiamiento de los partidos y un límite del
gasto electoral. (ANSA).
MBA-MZU/MRZ
27/11/2015 22:32
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