Por Francisco Forteza
LA HABANA, 8 (ANSA)- Las FARC colocaron la bola en el terreno
del gobierno colombiano al proponer una nueva tregua unilateral,
reconocida de inmediato por el presidente, Juan Manuel Santos
como "un gesto" aunque , afirmó, "se necesita más". "Valoramos el gesto de cese unilateral de fuego de las FARC
pero se necesita más, sobretodo compromisos concretos para
acelerar negociaciones", escribió Santos en la red social
Twitter. La guerrilla que desarrolla un diálogo en Cuba desde
noviembre de 2012 con el gobierno colombiano emitió este
miércoles un comunicado en el cual anunció su "disposición de
ordenar un cese al fuego unilateral a partir del 20 de julio,
por un mes".
El motivo que explicaron los insurgentes para su propuesta es
que "buscamos con ello generar condiciones favorables para
avanzar con la contraparte en la concreción del cese al fuego
bilateral y definitivo". "Vinimos a Cuba a alcanzar un acuerdo de paz, a poner fin a
una guerra que sobrepasa el medio siglo. Nada puede complacernos
más que acabar definitivamente con la confrontación, la
violencia, la generación de nuevas víctimas y el sufrimiento del
pueblo colombiano a consecuencia del conflicto", agregaron
También vincularon la nueva tregua con un respaldo a un
llamado de los países garantes Cuba y Noruega y "acompañantes"
del proceso de diálogo Venezuela y Chile, de "desescalar" el
conflicto armado en Colombia, el cual ha puesto en jaque las
conversaciones de La Habana en las últimas semanas. Los acontecimientos de hoy, que pueden asumirse como un
intento de salvar las conversaciones que cumplen con su ciclo 38
en la capital cubana, siguen a un momento en el cual la crisis
pareció tocar fondo. El lunes ambas partes intercambiaron acusaciones y
advertencias. En una entrevista que distribuyó el gobierno en
Internet, el negociador oficial principal Humberto de la Calle
dijo que "Por bien o por mal, el proceso de paz se está
acabando…"
"Es posible que un día de estos las FARC no nos encuentren en
la mesa de La Habana", agregó. Pero también sugirió que la
posición gubernamental de no acceder a un cese al fuego hasta
que no esté firmado un tratado de paz final, podía cambiar
siempre que el acuerdo de tregua fuera "serio, definitivo y
verificable".
El comentario inmediato del presidente Santos a la propuesta
de las FARC parece enmarcarse en esos términos cuando pide "más
compromisos concretos" para silenciar las armas, aunque hasta el
momento no hay detalles de lo que quisiera el gobierno en
concreto el gobierno, salvo que se detengan de inmediato las
acciones de los guerrilleros, que ha mencionado como terrorismo. La organización guerrillera pidió además en su comunicado de
hoy "los buenos oficios como veedores de esta determinación, al
Frente Amplio por la Paz, las iglesias y al movimiento
constituyente por la paz".
BY2/MRZ
08/07/2015 19:23
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