BOGOTA, 7 (ANSA) - El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, aceptó hoy la mediación de Uruguay para abrir un espacio de diálogo con su similar de Venezuela, Nicolás Maduro, con el que se buscaría ponerle fin a la crisis desatada por el cierre de la frontera común.
    "La semana pasada recibí una llamada telefónica del presidente de Uruguay, Tabaré Vásquez, quien ofreció sus buenos oficios para facilitar el diálogo con Venezuela. Acepté su ofrecimiento y le comuniqué que estaba dispuesto a que esta reunión fuera, inclusive, en Montevideo si él lo consideraba necesario previo cumplimiento de las condiciones humanitarias mínimas que establecimos", dijo Santos.
    El mandatario colombiano le ha pedido a Caracas abrir un "corredor humanitario" para el paso de estudiantes desde Venezuela hacia su país, algo que ya se dio, la autorización para que los expulsados puedan sacar de territorio vecino sus enseres y que en caso de nuevas deportaciones de colombianos se les aplique la ley interna para su expulsión.
    "Reitero mi disposición a reunirme con el presidente Maduro, para que a través de un diálogo serio y respetuoso, podamos resolver los problemas de las fronteras que afectan tanto a colombianos como a venezolanos", manifestó Santos.
    El jefe de Estado aseguró que desde el momento en que empezó la crisis intento hablar telefónicamente con su par venezolano, quien se rehusó a contestar sus llamadas, al tiempo que agradeció a los países y organismos que "se han ofrecido a ayudar para lograr una solución pronta a esta situación".
    "Estoy listo, estoy listo para el diálogo, pero eso sí que nunca más, nunca más se vuelvan a violar los derechos fundamentales, los derechos humanos, de nuestros compatriotas", agregó Santos.
    La crisis entre los dos países comenzó el pasado 19 de agosto, tras la orden de Caracas de cerrar la frontera, en el estado de Táchira, tras el ataque a tres militares por presuntos contrabandistas.
    En respuesta, el gobierno de Maduro decretó el estado de excepción en cinco municipios fronterizos y endureció su discurso contra Bogotá, a quien acusó de no frenar la violencia en la zona limítrofe y permitir el contrabando, sumado a la deportación de miles de personas y la salida por cuenta propia miles más, por el temor a ser violentados.
    Según datos oficiales del gobierno colombiano, a la fecha un total de 13.962 personas abandonaron Venezuela, 1.443 de ellas fueron deportadas por Caracas. La mayoría ha recalado en nueve albergues dispuestos por el gobierno, mientras 1.279 han retornado a sus ciudades de origen. YK7-MAC/ACZ
08/09/2015 00:41