Por Francisco Forteza LA HABANA, 25 (ANSA)- El gobierno colombiano y las FARC reanudaron su diálogo de paz en Cuba pese al agravamiento del conflicto armado en Colombia, descrito por los guerrilleros hoy como "arremetida gubernamental" mediante "masacres".
    Sin embargo, y pese a la atmósfera palpablemente tensa entre ambas partes frente a las muertes de 37 guerrilleros por bombardeos del ejército colombiano, la delegación en La Habana de los insurgentes afirmó que "escalar la guerra no es el camino".
    Pablo Catatumbo, uno de los negociadores de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, expuso ante la prensa que "en La Habana se discute el futuro de Colombia y solo los más necios, los ultramontanos y los guerreristas podrían confundir esta obligación con debilidad de las partes".
    "En las FARC-EP no nos alegramos por la muerte de ningún compatriota. Nos duelen los once soldados (fallecidos en el poblado) de Buenos Aires y nos duele la muerte de todos nuestros camaradas. Nos duele profundamente la situación del niño indígena Yerman Vázquez Campo herido gravemente el 12 de mayo por un artefacto del Ejército abandonado en la Hacienda La Ucrania, corregimiento El Jagual de Corinto, Cauca, por la fuerza de tarea Apolo, hecho que fue silenciado por todos los medios de comunicación", dijo Catatumbo. En un comunicado emitido el lunes, bajo un llamado a no escalar el conflicto, las FARC mencionaron "la arremetida gubernamental de estos días, con dos masacres de guerrilleros y guerrilleras". "Duele constatar que una parte de Colombia se ha acostumbrado a una guerra que dura ya más de 50 años y aún no tiene vencedores ni vencidos", expusieron.
    Dijeron que las operaciones del ejército en Colombia se desarrollan "en un contexto de intensificación de operativos militares y de persecución" . "Ni el gobierno nacional, ni el presidente (Juan Manuel) Santos pueden actuar al vaivén de intereses ultraderechistas, nacionales y extranjeros, presiones militaristas, o cálculos electoreros oportunistas para subir en las encuestas", subrayó el documento.
    No obstante, la "conclusión" de los insurgentes ante el agravamiento del conflicto pareció condensarla Catatumbo al señalar que "“mantendremos en alto nuestras banderas de paz con justicia social, cese bilateral de fuegos y Asamblea Nacional Constituyente. Por esta senda es posible una alternativa a la guerra".
    Las muertes de los guerrilleros la semana pasada, llevaron a la agrupación a cancelar una tregua unilateral bajo la cual, no obstante, ocurrieron también muertes de militares. "No estaba en nuestra perspectiva la suspensión de la determinación del cese el fuego unilateral e indefinido proclamado el 20 de diciembre de 2014 como un gesto humanitario", dijo el viernes las FARC. Analistas colombianos consideraron que el diálogo de paz iniciado en Cuba en noviembre de 2012 y aún sin una fecha aproximada de fin, fue "sacudido" y permanece "bajo severas presiones" a causa de los últimos acontecimientos. En Colombia ambas partes intensificaron operaciones bélicas. El viernes se anunciaron por lo menos tres muertes, dos de civiles. BY2/MRZ
25/05/2015 19:08