LA HABANA, 26 (ANSA)- Una compañía de Alabama, Estados
Unidos, anunció que recibió un permiso oficial de La Habana para
invertir en Cuba, operación que ocurre por vez primera en medio
siglo, aunque el embargo de Washington puede impedirla. Se trata de la Cleber-tractors de Alabama, en el sur
estadounidense, cuyos dueños divulgaron que tienen la
autorización de la isla para invertir en un centro de ensamblaje
y manufacturación en el puerto de Mariel. En el Mariel, a 45
kilómetros al este de La Habana, ya opera una Zona Especial de
Desarrollo fundada para atraer capitales extranjeros al país,
bajo condiciones "suaves" impositivas y financieras. Según el propietario de la Cleber, Horace Clemmons, ya posee
un documento firmado por una autoridad de la Zona Especial en la
que muestra el interés de su gerencia en que la firma comience
operaciones de ensamblaje de tractores para su comercialización
en Cuba, así como su exportación.
Hasta el momento Cuba mantuvo una discreción pública oficial
completa sobre el asunto. Tampoco la prensa local divulgó la
noticia. En Estados Unidos, el diario Washington Post describió el
jueves el anuncio como un intento de Clemmons y su socio Saul
Berenthal, ambos ingenieros que fueron empleados de la IBM de
"convertirse" en los primeros estadounidenses en invertir en
Cuba después de más de 50 años de conflicto. "Ambos han estado
trabajando con funcionarios en Cuba y en Washington para lograr
su al parecer improbable negocio con la isla en un proyecto
piloto para una nueva era en las relaciones entre los dos
países", comentó el periódico. El Mariel parece ser un escenario bueno para ello. Las
autoridades cubanas abrieron la zona a capitales de todo el
mundo y aclararon que los de Estados Unidos no serían excluidos.
Pero el embargo que aplica ese país sobre Cuba desde hace más de
cinco décadas, prohíbe hacerlo a sus empresarios. Según la
gerencia de la zona ya son más de 200 empresas del mundo las que
"declararon su interés" en abrir sedes en Mariel o incluso ya
presentaron sus peticiones al Estado cubano. Recientemente se
han concedido los permisos correspondientes a dos firmas
mexicanas. Desde que los presidentes de Cuba, Raúl Castro, y de Estados
unidos, Barack Obama anunciaron conjuntamente, cada uno en su
país, el 17 de diciembre pasado que se desarrollaba un diálogo
bilateral para normalizar las relaciones bilaterales, comenzó un
intenso movimiento empresarial "americano" con la vista sobre el
mercado de Cuba. Esa dinámica llevó en febrero de este año a
una empresa estatal cubana, ETECSA, y otra privada de Estados
Unidos, IDT Domestic Telecom, a un contrato mutuo para operar
telecomunicaciones directas entre los dos países, cortadas por
décadas por el conflicto. En abril pasado, la prensa cubana confirmó que la agencia de
Estados Unidos Airbnb había comenzado a promocionar casas
privadas de alquiler en Cuba para los visitantes
estadounidenses. Ahora esa empresa ha anunciado su expansión en
este mercado. Las únicas y muy restringidas relaciones comerciales que
mantienen los dos países datan del año 2000 cuando granjeros y
empresas agrícolas de Estados Unidos comenzaron a vender
alimentos a una empresa estatal cubana, cuando el congreso en
Washington aprobó esa excepción al embargo. Ese permiso no
incluye exportaciones cubanas, exige pagos en efectivo y por
adelantado de las compras isleñas y otras restricciones que han
hecho caer progresivamente esas operaciones.
BY2/MRZ
26/06/2015 19:44
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