Por Franscisco Forteza
LA HABANA, 3 (ANSA)- El diario oficial Granma publicó hoy una
"guía" para las relaciones de Cuba y Estados Unidos, encabezada
por conceptos como igualdad soberana, arreglo de controversias
pacíficamente y no intervención en asuntos internos. Los dos países anunciaron el miércoles el restablecimiento de
las relaciones bilaterales al nivel de embajadas para el 20 de
julio próximo, tras no existir esos lazos desde enero de 1961. El artículo del órgano del gobernante Partido Comunista,
agregó como "principios" de esas relaciones diplomáticas el
"abstenerse de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza
contra la integridad territorial o la independencia política de
cualquier Estado".
El periódico reconoció que "para dos países que han carecido
de nexos oficiales por más de medio siglo, resulta muy difícil
encontrar recetas sobre cómo construir una nueva relación que no
repita los errores del pasado".
Mencionó como "referente indispensable respecto al camino a
seguir", la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho
Internacional, en particular, las Convenciones de Viena sobre
Relaciones Diplomáticas y Consulares.
Citó el criterio de un experto cubano, el profesor
universitario Rodolfo Dávalos, presidente de la Corte Cubana de
Arbitraje Comercial Internacional, quien describió además el
llamado "derecho internacional consuetudinario, también llamado
costumbre internacional" que "no es más que la práctica seguida
por los sujetos internacionales que es generalmente aceptada por
estos como Derecho". "Ninguna práctica fuera del marco de las funciones de las
misiones diplomáticas que establece la Convención de Viena
puede ser lícita salvo que esté amparada por el Derecho
internacional consuetudinario, y este no ampara ningún acto
ilícito, contrario a las reglas del Estado receptor", advirtió
Granma.
El turbulento conflicto entre los gobiernos de ambas
naciones, que en su clímax se acerca a los 60 años generó
choques militares, políticos e ideológicos, e incluso en la
esfera diplomática especialmente tras fundarse las oficinas de
intereses en ambas capitales en 1977 durante la presidencia del
demócrata James Carter.
Las autoridades cubanas consideran como agresivas contra su
soberanía las relaciones que mantienen las estadounidenses con
una oposición interna que describió hasta ahora como "mercenaria
de Washington". Además, el presidente Raúl Castro denunció
recientemente como ilegales cursos de periodismo en la sede de
la oficina de intereses de Estados Unidos en la capital cubana.
Granma incluyó en su guía que la valija diplomática no podrá
ser abierta ni retenida aunque "los bultos" que contenga
"deberán ir provistos de signos exteriores visibles indicadores
de su carácter y sólo podrán contener documentos diplomáticos u
objetos de uso oficial". Durante el conflicto ocurrieron
acusaciones cubanas de contenido "subversivo" en esas valijas. El diario subrayó en otro punto que "sin perjuicio de sus
privilegios e inmunidades, todas las personas que gocen de esos
privilegios e inmunidades deberán respetar las leyes y
reglamentos del Estado receptor. También están obligados a no
inmiscuirse en los asuntos internos de ese Estado".
Expuso también que los locales de la misión "no deben ser
utilizados de manera incompatible con las funciones de la misión
tal como están enunciadas en la presente Convención, en otras
normas del derecho internacional general o en los acuerdos
particulares que estén en vigor entre el Estado acreditante y el
Estado receptor".
BY2/ACZ
03/07/2015 15:54
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