Por Francisco Forteza
LA HABANA, 21 (ANSA) - El secretario de Estado
estadounidense, John Kerry, llegará a La Habana dentro de 25
días para izar su bandera en la embajada de Estados Unidos, que
recuperó esa jerarquía después de 54 años. El compás de espera, no obstante, no tiene por qué ser
aburrido.
Tras el restablecimiento simultáneo de las relaciones
diplomáticas desde el primer minuto del lunes 20 de julio, los
dos gobiernos han declarado que el "deshielo" anunciado el 17
de diciembre comienza ahora como una "segunda etapa" larga y
compleja, que seguramente tendrá sobre la mesa de diálogo
asuntos escabrosos pendientes entre los dos gobiernos. En su rueda de prensa ayer junto al canciller cubano, Bruno
Rodríguez, Kerry subrayó que se habó de "temas de interés mutuo"
como "la cooperación en las fuerzas del orden, la lucha contra
los estupefacientes, las redes de comunicaciones, el Internet,
temas ambientales, derechos humanos y también la trata de
personas. Y, por supuesto, también hablamos sobre la
apertura de nuestras embajadas".
"Deseamos asegurarnos de que estas embajadas puedan funcionar
plenamente, y estoy seguro de que nuestros diplomáticos en ambos
países van a tener la libertad de viajar y conversar con los
ciudadanos de todo el país", aseguró Kerry. En otra referencia sobre las sedes durante el encuentro con
la prensa, el canciller Rodríguez expuso que "hemos arribado a
acuerdos". "Puedo decir -subrayó- que Cuba será absolutamente respetuosa
de dichas disposiciones, sus diplomáticos se atendrán firmemente
en su conducta a esas reglas y crearemos en La Habana todas las
condiciones para el normal funcionamiento de la nueva Embajada
de Estados Unidos en nuestra capital". Tras el anuncio del restablecimiento de las sedes
diplomáticas, que no existían desde enero de 1961, pasaron siete
meses antes de la reactivación simultánea del lunes, período
durante el cual se negoció sobre la manera en que
funcionarán ahora.
Kerry anunció que el 14 de agosto próximo "voy a realizar mi
primer viaje como Secretario de Estado a Cuba, y también voy a
celebrar una ceremonia similar en nuestra Embajada en La
Habana". Sobre las "diferencias" que separan a sus gobiernos, y que
hará -según ambos- complicada la "normalización" el canciller
cubano incluyó el bloqueo y demandó su desaparición, así
como la devolución del territorio ocupado que tiene en
Guantánamo la base naval estadounidense.
También "la compensación a nuestro pueblo por daños humanos y
económicos". Hoy martes, el "día después" de la reapertura de
embajadas, el diario oficial cubano Granma publicó textualmente
la rueda de prensa conjunta de Kerry y Rodríguez, y la primera
nota de la Embajada de Estados Unidos en La Habana.
Por lo pronto, un primer efecto de la reapertura de la
embajada estadounidense en La Habana -en el mismo edificio de
siete plantas en el que estuvo desde 1953, cuando se edificó,
hasta 1961- es la afluencia de turistas extranjeros
que recorren sus alrededores. "Ya tomé fotos de los lugares que Ernest Hemingway solía
visitar en esta ciudad, de los bares como el Slooppy Joe en el
que solían pasar el tiempo estrellas de Hollywood antes de 1959
e incluso de una estatua de Abraham Lincoln que hay en La
Habana. Me faltaba la de la embajada" comentó a ANSA
Jerry, un hombre que se identificó como canadiense.
BY2/MRZ
21/07/2015 20:33
|