Por Francisco Forteza
LA HABANA 10 (ANSA)- "El Niño", la poderosa corriente en el
Océano Pacífico, ha hecho enloquecer al clima cubano y tras
causar una sequía en época de lluvias en 2015 amenaza con
traerlas "por encima de lo normal" desde ahora a enero próximo,
época de seca. "El evento El Niño/Oscilación del Sur (ENOS), podría comenzar
a manifestarse desde el venidero diciembre, incrementándose
luego a partir de enero".
"Se espera que en la etapa de noviembre a enero ocurran
totales de precipitación cercanos o por encima de lo normal en
las tres regiones del país", según un pronóstico del Centro del
Clima del Instituto de Meteorología de Cuba, publicado hoy. Según la entidad, el ENOS, una corriente marítima que influye
en el clima planetario, continúa su desarrollo en el océano
Pacífico ecuatorial y según predicen la mayoría de los modelos,
puede llegar al rango de muy fuerte durante noviembre-enero.
La intensidad potencial se compara a la alcanzada por El Niño en
las temporadas invernales de 1982-1983 y 1997-1998. El fenómeno también suele dislocar las temperaturas en la
isla, donde son notables solo dos estaciones en el año, que los
cubanos llaman verano e invierno, esta última etapa modificada
por los "nortes", frentes climáticos originados en el Polo Norte
en esa época del año, que atraviesan Canadá y Estados Unidos
para llegar debilitados al Mar Caribe. Según el nuevo vaticinio diciembre y febrero será un lapso
solo "ligeramente frío" y habrá calor "fuera del acostumbrado"
en las regiones central y oriental del territorio cubano. El Niño cargó también con "la culpa" de una prolongada sequía
en todo el país, aún latente, que ha traído medidas de
emergencia, especialmente de ahorro, en algunos casos rigurosas. Sin embargo, los científicos locales no atribuyen todas las
vicisitudes climáticas cubanas al "travieso infante del clima",
como llaman al ENOS algunas crónicas locales. Hoy se anunció, por ejemplo, que Cuba "insistirá" en la
adopción de un acuerdo vinculante y transparente en la próxima
Cumbre mundial sobre cambio climático (COP21), que comenzará en
París dentro de tres semanas.
La ministra cubana de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente
(Citma), Elba Rosa Pérez, dijo a la prensa que las autoridades
están mirando "hacia dentro del país para hacer un aporte
importante sobre la adaptación al cambio climático"
"Nos hemos propuesto asumir hasta 2020 y después hasta 2030
mayor cantidad de fuentes renovables, utilizar más la energía
eólica, la solar, la biomasa... en fin, hay una estrategia en el
corto, mediano y largo plazos que hemos preparado", expuso la
titular a la agencia de prensa cubana Prensa Latina. Este país quiere una "transferencia de tecnologías" porque
"el cambio climático no es una teoría ni un lema, sino que tiene
efectos de diferente naturaleza". "El clima no tiene fronteras, ni ideologías ni países; es
algo que compete a todos. Tenemos que resolver este problema y
no pensando únicamente en nosotros, sino en las futuras
generaciones", aseguró.
La región del Mar Caribe refleja con gran nitidez el cambio
climático, con erosión de los suelos, penetraciones del mar y
pérdidas de tierras cultivables, grandes tormentas y ciclones
tropicales, sequías interminables y lluvias intensas
inesperadas. Por tanto "El Niño" parece tener a su favor un gran
campo de "juegos" para sus "travesuras".
BY2/ACZ
10/11/2015 16:57
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