Por Francisco Forteza
(ANSA)- LA HABANA, 2 ENE - Las cooperativas privadas en
Cuba, aún un "experimento" del Estado, esperan para extenderse
porque surjan mercados mayoristas, que, a su vez, reciban
capitales extranjeros, incluyendo quizá los de Estados Unidos. Las llamadas "cooperativas no agropecuarias", entidades
formadas por pequeños accionistas, antes empleados estatales,
son parte importante de la fórmula descrita por las autoridades
cubanas para conseguir un "socialismo próspero y sustentable".
De acuerdo con cifras oficiales, oscilantes desde fines de
2014, unas 400 de esas entidades se aprobaron o están en
estudio. Esta semana, durante los trabajos parlamentarios de fin de
año, se divulgó que las cooperativas tienen actualmente 2.686
socios cuyo salario promedio mensual es de 3.900 pesos
nacionales, o sea unos 160 dólares.
El sueldo general promedio al mes en el país, donde predomina
el sector estatal con retribuciones más bajas, es de alrededor
de 600 pesos cubanos. Durante las sesiones de la Asamblea Nacional del Poder
Popular, órgano legislativo nacional, esta semana, diputados
advirtieron sobre "la necesidad" de que tanto las cooperativas
como el sector privado formado actualmente por medio millón de
"cuentapropistas" en más de 200 oficios de servicio, puedan
comprar sus insumos en mercados mayoristas.
La ausencia de mercados mayoristas lleva a los privados,
también los reunidos en cooperativas, a comprar sus insumos en
el mercado minorista agudizando la escasez general de mercancías
e incluso, según analistas, impulsando indirectamente un mercado
ilegal. Los capitales extranjeros pueden convertirse en un respaldo
para los presupuestos mayoristas, cuestión que es oficialmente
aceptada. En mayo pasado, Odalys Escandell, viceministra primera
de Comercio Interior, dijo a la prensa nacional que Cuba
promoverá nuevos proyectos dirigidos a estimular la inversión
extranjera en su comercio mayorista. Escandell agregó que esas posibilidades "se enfocan hacia la
creación de infraestructuras y la atracción de recursos
financieros, tecnológicos y de métodos gerenciales avanzados,
para inyectar eficiencia en la cadena nacional de
abastecimientos", según la citó la emisora oficial Radio Habana
Cuba, entonces. Las cooperativas no agrícolas ya "entraron" además como
elemento activo al complejo proceso de "deshielo" entre Cuba y
Estados Unidos. Hoy, un diario del estado de la Florida reveló
que una firma destacada en Tampa propuso tanto a las autoridades
estadounidenses como a las cubanas la fundación de un mercado en
Cuba con productos de amplio consumo hechos en Estados Unidos. Proyectos como ese enfrentan, primero que todo, como obstáculo
casi impenetrable el embargo que aplica Washington a la isla.
También deberán ajustarse a las condiciones de la ley vigente
cubana para las inversiones extranjeras.
Actualmente las autoridades en Cuba analizan propuestas de
empresas privadas de Europa, América Latina y otras regiones
para abrir sus negocios especialmente en la zona especial del
Mariel, que ofrece facilidades impositivas y de operaciones y
han aceptado unas 40.
Entre las aceptadas está una firma de Alabama, Estados
Unidos, fabricante de tractores, que ahora enfrenta un lento
compás de espera por conseguir permisos en su propio país, que
la exceptúen del embargo.
BY2/ACZ
02/01/2016 17:56
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