Por Francisco Forteza
(ANSA)- LA HABANA, 19 MAR - El Capitolio nacional, similar
al de Washington, el Gran Teatro Alicia Alonso y la reabierta
embajada estadounidense, todos edificios emblemáticos cubanos,
están ya preparados para la visita del presidente Barack Obama,
del domingo al martes próximos.
Obama desarrollará un encuentro sin precedentes con
ciudadanos cubanos en el Gran Teatro, que está situado a solo
pasos del Capitolio cubano. La embajada estadounidense está sobre la avenida Malecón, que
corre frente al mar, a unos cuatro kilómetros. Las tres edificaciones son emblemáticas por distintas
razones. El teatro es una joya de la cultura cubana que es sede
actual del Ballet Nacional, con gran prestigio internacional,
mientras que el Capitolio fue la sede del congreso de Cuba antes
de que fuera abolido tras la revolución triunfante el 1 de enero
de 1959. El Gran Teatro de La Habana será, según la agenda de tres
días de Obama en La Habana del 20 al 22 próximos, el escenario
de un momento sin precedentes cuando el presidente
estadounidense hable con los asistentes, representantes de "la
diversa sociedad civil" de Cuba, según el gobierno cubano. El edificio actualmente un complejo cultural compuesto por
varias salas. Es sede del Ballet Nacional de Cuba, del Teatro
Lírico Nacional y del Ballet Español de Cuba, fue diseñado por
el arquitecto belga Paul Beleu e inaugurado originalmente en
1915. Antes, en el mismo lugar, desde el siglo XIX, estuvo el
teatro Tacón, que fuera el más grande y lujoso del continente
americano; y por sus cualidades técnicas el tercero del mundo,
después de la Scala de Milán y el de la Ópera de Viena. El Capitolio habanero está sometido a una restauración con el
fin de utilizarse como sede del actual parlamento cubano,
llamado Asamblea Nacional del Poder Popular. Construido en los
años 30 del siglo pasado, fue la sede del desaparecido Congreso
de la República. Dos estatuas de bronce con pedestal de granito, en proceso de
restauración "resguardan" el edificio. Son obras del italiano
Angelo Zanelli, también autor del friso del Altar de la Patria,
que forma parte del monumento en Roma a Víctor Manuel II, primer
rey de Italia. Ambos grupos escultóricos, uno masculino y otro femenino
están fundidos por la Fonderia Lagan de Nápoles, en Italia, y
tienen una altura de más de seis metros cada uno. Representan el
progreso de la actividad humana y la virtud tutelar del pueblo,
respectivamente. Zanelli también fue el escultor de la Estatua de la
República, de bronce laminado en oro, de 17 metros de altura,
incluyendo su base de mármol ónix antiguo egipcio, la tercera
del mundo más alta bajo techo, solo superada por el Buda de Oro
de Nava, en Japón, y el Memorial Lincoln, en Washington. La embajada de Estados Unidos por su parte, simboliza las
relaciones muy complejas de la isla con un vecino muy poderoso,
Estados Unidos.
Fue cerrada en 1961 cuando Washington rompió relaciones
diplomáticas con Cuba al iniciarse el cruento conflicto que el
"deshielo" actual entre ambas naciones quiere terminar.
El secretario de estado de Estados Unidos, John Kerry,
presenció el izado de la bandera de las barras y las estrellas
en el lugar por primera vez en más de medio siglo el 14 de
agosto de 2015, durante la ceremonia de reapertura.
BY2-ADG/ACZ
19/03/2016 16:49
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