Por Alessandro Logroscino
LONDRES, 31 (ANSA) - El ex premier británico Tony Blair
intentó en el 2011 un acuerdo de último momento para salvar a
Muammar Khadafi, uno de sus últimos viejos "amigos" al que trató
de darle una mano, en plena guerra civil en Libia y cuando los
bombardeos francobritánicos ya sellaban su destino. La revelación surge de un libro, una biografía del actual
primer ministro conservador David Cameron, firmada por Anthony
Seldon.
Según el Times, el libro amenaza con desencadenar una nueva
tormenta política sobre Blair, investigado ya por su papel en la
guerra en Irak, junto con el entonces presidente de Estados
Unidos George W. Bush. Las fuentes que hablaron con Seldon dijeron que en aquel 2011
Cameron fue contactado telefónicamente por su predecesor
laborista mientras arreciaba la "campaña de Libia", destinada a
llevar a la caída y linchamiento del gobernante en fuga. Blair, según la reconstrucción, había recibido una
aproximación de un "estrecho colaborador de Khadafi", que quería
"llegar a un acuerdo". El acuerdo hubiera debido preludiar una salida de escena del
gobernante libio, de quien Blair se erigía de hecho como
garante, un poco como en 2004: en esa ocasión estuvo en primera
fila para recomponer las relaciones entre Libia y Occidente,
obteniendo de Khadafi una renuncia a sus programas militares
nucleares y las armas de destrucción masiva, a cambio de
inversiones en el país norafricano. En ese momento también se produjo la controvertida liberación
de Abdul Baset Ali al-Megrahi, entonces detenido en Escocia como
uno de los responsables del atentado contra el avión de
pasajeros que estalló en los cielos de Lockerbie en 1988. Sin embargo, Cameron finalmente se negó a todo tipo de
negociación. No quiso, argumenta Seldon, suscribir "cualquier
iniciativa que pudiera ser vista como una forma de auxilio al
dirigente libio". La presunta revelación, que el entorno de Tony Blair se negó
a comentar, fue reportada hoy por el Times de Rupert Murdoch con
tono escandalizado. El diario le da voz a Daniel Kawczynski, "halcón" del Partido
Conservador en el seno de la comisión de Exteriores de la Cámara
de los Comunes (que investiga la intervención militar en Libia),
quien calificó de "irresponsable" y "sórdido" el intento
atribuido a Blair. Más prudente se mostró su compañero de partido Nadhim Zahawi,
que se limitó a invocar una audiencia con el ex premier
laborista para "comprender mejor lo que ocurrió" en aquella
oportunidad. Vincent Fean, embajador británico entre 2006 y 2010, se
mostró por su parte escéptico: "No creo -comentó- que (Khadafi)
haya querido negociar nunca un retiro digno". El libro de Seldon -que incluye opiniones y episodios
embarazosos sobre Cameron, comenzando por sus "dudas" sobre los
planes de intervención en Siria tras la experiencia de Libia-
abre otros aspectos inéditos sobre las incursiones de 2011,
particularmente interesantes vistos en forma retrospectiva. Entre otras cosas, revela un enfrentamiento al respecto entre
Cameron y el entonces jefe de los servicios de inteligencia del
MI6, John Sawers, convencido de que aquellas bombas -fuera de
las "razones humanitarias" enarboladas una vez más por las
cancillerías occidentales- no hubieran debido ser lanzadas
nunca, por ser ajenas a cualquier "interés nacional" de Gran
Bretaña.
LR-MI/ACZ
31/08/2015 19:27
|