WASHINGTON, 19 (ANSA)- La campaña electoral se pone al rojo
vivo en Estados Unidos y nuevamente Donald Trump, el
controvertido aspirante republicano que sueña con llegar a la
Casa Blanca, es eje de las polémicas esta vez por avalar que el
presidente Barack Obama es "un musulmán". "Estoy moralmente obligado a defender al presidente cada vez
que alguien dice algo malo o lanza una polémica acerca de él? No
lo creo", afirmó hoy Trump. De ese modo, rompió el silencio con un tweet tras la
polvareda que lo envolvió después de la sentencia pronunciada
por un partidario quien aseguró despectivo "Obama, musulmán" en
un mitin en Nueva Hampshire. "Esa es la primera vez en mi vida que he causado una
controversia sin decir nada", agregó irónico este sábado el
candidato a la nominación republicana.
"Si alguien hubiera hecho un comentario desagradable o
controvertidas sobre mí al presidente, de verdad creen que él
intervendría para defenderme? No hay ninguna posibilidad de
eso!", amplió por Twitter.
El multimillonario estadounidense canceló su participación en
un acto ayer en Carolina del Sur y esta noche era esperado en
Iowa. "Barack Obama es un estadounidense y un cristiano", enfatizó
anoche otro candidato republicano, Jeb Bush, diferenciándose de
Trump y objetando implícitamente que el magnate no haya
corregido a un partidario quien dijo que el presidente de
Estados Unidos era un musulmán y "ni siquiera un americano". El presidente "es un hombre de talento y, por cierto, es
estadounidense y es un cristiano, su problema no es si nació
aquí o lo que su religión", dijo Bush en un discurso en Mackinac
Island, Michigan.
"Su problema es que es un liberal progresista que destruye
cualquier persona que no esté de acuerdo con él", agregó Bush,
crítico del presidente demócrata. Chris Christie, gobernador de New Jersey, también aspirante
republicano tampoco dio chance a Trump. "Te digo lo que yo habría hecho, yo no habría permitido eso
si alguien hubiera dicho tal cosa en un encuentro conmigo. Yo
habría dicho, 'no, mira, antes de responder, aclaremos algunas
cosas para el resto de la audiencia'. Creo que como líder tienes
la obligación de hacer eso", afirmó Christie a la cadena NBC. Desde las filas demócratas, la candidata favorita, Hillary
Clinton, reprochó la actitud del magnate en un mensaje en su
cuenta de la red social Twitter. "Es alarmante y totalmente equivocado que Trump no denunciara
los comentarios falsos sobre el presidente y la retórica de odio
contra los musulmanes. Basta", escribió la ex secretaria de
Estado. Las polémicas estallaron en la campaña cuando el magnate
Trump volvió a ofender a otro grupo social, esta vez a los
musulmanes al no rechazar unos comentarios insultantes hechos
por sus seguidores. "Tenemos un problema en este país, se llama musulmanes.
Sabemos que nuestro presidente es uno de ellos, que no es si
quiera estadounidense. Pero de todos modos, tenemos campos de
entrenamiento allí donde nos quieren matar. Mi pregunta es,
¿cuándo podremos deshacernos de ellos?", preguntó a Trump uno de
sus seguidores en el encuentro en Nuevo Hampshire. El millonario no rechazó la premisa y se limitó a responder:
"Vamos a analizar muchas cosas diferentes, mucha gente está
diciendo que están pasando cosas malas, vamos a analizar eso y
muchas otras cosas". Después, otro seguidor tomó la palabra para decir que
aplaudía al hombre que dijo que el presidente de Estados Unidos
es un musulmán nacido en el extranjero, a lo que Trump contestó
con un "correcto", antes de pasar a la siguiente pregunta. Trump es uno de los republicanos que llevan años cuestionando
que Obama sea estadounidense, a pesar de que le forzaron a
publicar su partida de nacimiento en 2011, en la que demostró
que nació en Hawai en 1961. El director de campaña del magnate, Corey Lewandowski, trató
de justificarlo y dijo a la cadena CNN que Trump no oyó la
pregunta sobre la religión de Obama.
DAC-ADG/ACZ
19/09/2015 20:45
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