Por Marcos Romero
CIUDAD DE MEXICO, 3 (ANSA) - La "Ruta de la Izquierda", un
recorrido por sitios emblemáticos para los movimientos sociales
en México en el siglo XX, muestra por primera vez lugares de la
capital donde hubo actos de resistencia, conspiraciones y planes
que devinieron en rebeliones y guerras civiles. Aunque no se trata de una iniciativa turística, sino de un
proyecto de actividades paralelas tras un coloquio sobre la
izquierda realizado en septiembre pasado, el itinerario
prefigura de alguna manera un plan de viaje para el turista en
busca de experiencias nuevas. El recorrido fue definido por sus organizadores como "un
ejercicio de resignificación simbólica de la ciudad de México y
un esfuerzo por reconstruir la memoria colectiva a partir de
derroteros distintos a los del discurso oficial". Entre otros sitios, se incluye al Café La Habana, donde se
urdieron numerosos complots, la Plaza de las Tres Culturas,
escenario de la matanza de estudiantes del 2 de octubre de 1968
en manos del Ejército, el Bar la Opera, sitio de reunión de
intelectuales y activistas y el Palacio Nacional, la sede del
poder ejecutivo. Estos espacios han estado "marcados por la resistencia, el
encuentro y el desencuentro de quienes han luchado por la
justicia y la libertad de acción y pensamiento", señalaron los
organizadores. En total son quince lugares, entre los que figura el Palacio
Negro de Lecumberri, hoy sede del Archivo General de la Nación,
una de las más lúgubres prisiones que alojó a legendarios
combatientes de la Revolución, así como a no pocos ex
guerrilleros y activistas que sufrieron el yugo de la represión
gubernamental en los aciagos años 60 y 70. Entre sus "huéspedes2 figuraron los famosos combatientes de
la guerra civil de 1910, Francisco Villa y Felipe Angeles, el
pintor Manuel Rodríguez Lozano y el ex candidato presidencial de
izquierda Heberto Castillo. Ahí estuvieron recluidos además el escritor colombiano Alvaro
Mutis, así como el líder sindical Demetrio Vallejo y el gran
muralista David Alfaro Siqueiros. Está también la Cárcel de Belem, un sitio todavía más
tenebroso, en el cual eran recluidos los desafectos y enemigos
del dictador Porfirio Díaz, que gobernó al país con un garrote
en la mano y una zanahoria en la otra por más de tres décadas,
hasta su huída del país en 1911 exiliado a bordo del vapor
alemán Ypiranga hacia París.
En esta especie de "Gúlag" estuvieron presos por otra parte
periodistas y pensadores como Juan Sarabia, fundador del Partido
Liberal Mexicano, los activistas del anarquismo Ricardo y
Enrique Flores Magón y el novelista y crítico del porfiriato
Heriberto Frías .
La prisión tenía un cupo máximo para 600 reclusos, pero en
1890 albergaba a unos 7.000 hombres, mujeres y niños.
En 1913, durante un levantamiento contra el gobierno de
Francisco I. Madero, en la llamada "Decena Trágica", durante la
cual fue asesinado, fueron liberados los reos. Hoy día aloja a cinco escuelas, dos primarias, dos
secundarias y un jardín de niños, así como murales de famosos
pintores como Raúl Anguiano y Aurora Reyes. Uno de los sitios más atractivos sin duda es por otro lado el
llamado Bar La Opera, una taberna que reunía a la élite
porfirista pero donde también se juntaron figuras notorias de la
oposición armada como Pancho Villa, que un día lanzó un tiro al
aire mientras comía dejando un agujero en el techo que aún
persiste. Muchos años después, en los años '70, el lugar fue también
escenario de tertulia para figuras como los premio Nobel Gabriel
García Márquez y Octavio Paz, Carlos Fuentes, Fernando Benítez y
Carlos Monsiváis.
Otro sitio referencial análogo es el Café La Habana, cerca
del circuito de donde se ubican los grandes diarios mexicanos y
que reunió a notables periodistas e intelectuales, así como al
"Che" Guevara y a Fidel Castro, que allí fraguaron la Revolución
cubana. Allí sostuvieron por otra parte largas discusiones el
entonces desconocido escritor chileno Roberto Bolaño y su colega
mexicano Mario Santiago Papasquiaro, fundadores del movimiento
poético infrarrealista.
Los recorridos están organizados por la secretaría de Cultura
del gobierno del Distrito Federal, que ya planea convertirlos en
una ruta turística dirigida al público en general. (ANSA)
MRM/ACZ
03/10/2015 18:54
|