Por Marcos Romero (ANSA) - CIUDAD DE MEXICO, 31 MAR - Comerciantes del paradisíaco centro veraniego de Acapulco pidieron a los cabecillas de la delincuencia organizada una tregua en la ola de asesinatos que estremecen al puerto y mantienen en situación de zozobra a los lugareños y visitantes.
    Los dueños de hoteles y restaurantes pidieron además al gobierno federal y local "pactar" con los capos criminales para frenar la ola sangrienta que azota al legendario puerto, poseedor de una de las bahías más hermosas del mundo.
    "Hermanos de la delincuencia organizada (...) les pedimos de manera amable nos den unos días sin violencia", afirmó Laura Caballero, presidenta de la Asociación de Comerciantes de la Costera de Acapulco, donde al menos 42 personas fueron asesinadas durante el feriado de Semana Mayor.
    La empresaria convocó a una reunión de autoridades del estado y del gobierno federal, así como de dirigentes sociales "en general" el próximo 13 de abril para presentar "una propuesta de pacificación" en esta ciudad, epicentro de la espiral violenta que golpea al país.
    "Solicitaremos a todos los asistentes que lleven sus propias propuestas de pacificación, para que después, si ustedes nos dan la oportunidad de dialogar y convenir, realicemos el pacto con todos los 50 líderes de la delincuencia organizada por el bien de todos", dijo la empresaria en su inusual exhorto.
    La mujer empero no está sola en esta propuesta pues ya el obispo de la diócesis Chilpancigo-Chilapa, en el mismo estado de Guerrero, Salvador Rangel, pidió en días pasados al gobierno que "dialogue con las bandas" para que esta martirizada provincia se pacifique.
    Rangel afirmó que en sus prédicas, durante sus visitas a las parroquias de la región, le pide a los criminales buscar "la concordia, el perdón y que eviten realizar asesinatos y secuestros". "Los altos dirigentes de las cúpulas se saben arreglar", argumentó el obispo, quien dijo que "simplemente dialogando se desahogan y se sacan las vibras negativas y por eso es necesario hablar, para evitar más daños a terceros".
    Acapulco, la segunda ciudad de Guerrero, ubicado a 450 kilómetros de la capital mexicana, en las costas del Pacífico, ha sido por décadas uno de los destinos turísticos favoritos de mexicanos y extranjeros por la belleza de su bahía, que rivaliza con la de Río de Janeiro, pero también por sus atributos naturales y su inmejorable clima tropical.
    Pero desde que el gobierno del presidente Felipe Calderón declaró en diciembre de 2006 la "guerra contra el crimen" con apoyo de las Fuerzas Armadas, se desató el infierno en este "paraíso terrenal", donde ricos y famosos como el cantante Luis Miguel solían tener sus residencias veraniegas.
    Caballero señaló que si la situación continúa como hasta ahora en Acapulco "podría revivirse la crisis de inseguridad del 2006, cuando la gente comenzó a dejar de salir a las calles por temor a las balaceras".
    "Nos tienen de rodillas, tenemos que levantar la voz, tenemos que salir a las calles. La vida de Acapulco era otra", dijo la empresaria, quien señaló que "ahorita te da miedo andar por la Costera", la principal avenida que corre a lo largo de la bahía del puerto, vigilado por unos 4.500 elementos de seguridad locales y federales.
    "Te sigue dando miedo porque ya viste a un amigo o un familiar que cayó, porque ya han sido asesinados y acribillados muchos de nuestros amigos", señaló la comerciante, quien señaló que como recurso extremo podrían hacer un llamado a los turistas a "no visitar Acapulco" ante el riesgo "de la violencia en sus calles y zonas" de atracción.
    El martes 22, tres personas fueron asesinadas en la playa La Angosta, dos de ellas por la tarde, ante decenas de turistas, frente a La Quebrada, un acantilado de 45 metros de cuya punta saltan todas las tardes los famosos clavadistas locales y atraen multitudes.
    Los empresarios turísticos urgieron a las autoridades a una mayor coordinación debido a que consideraron que "la estrategia de seguridad no está dando resultados".
    En enero pasado, una organización civil declaró a Acapulco como la ciudad más violenta del planeta, sólo es superada por Caracas, Venezuela, San Pedro Sula, Honduras y San Salvador. MRM-ADG/ACZ
31/03/2016 20:41