(ANSA) - NUEVA YORK, 20 GIU - Los diez mandamientos,
claramente visibles y legibles, deben exponerse en todas las
aulas de las escuelas públicas, según lo estableció Luisiana, el
primer estado norteamericano que lo hace, en su controvertida
ley y ya muchos gritan escándalo y hablan de una norma
inconstitucional.
El gobernador republicano Jeff Laundry la defiende a filo de
espada y provoca: "No veo que haya causas y recursos", dijo
irónicamente. "Si se quiere el respeto del Estado de derecho,
entonces hay que empezar por el legislador original, Moisés",
agregó.
La ley forma parte de la campaña más amplia de los grupos
cristianos conservadores para amplificar las expresiones
públicas de fe y, sobre todo, provocar acciones legales capaces
de llegar hasta la Corte Suprema, donde se espera una acogida
amistosa. Una convicción basada en la composición del Tribunal,
con su mayoría de sabios conservadores, y en sus recientes
sentencias.
En 2022, el tribunal se alineó con el entrenador de fútbol
de una escuela secundaria que afirmaba tener el derecho
constitucional de rezar en la línea de 50 yardas al final de los
partidos de su equipo.
"El clima ciertamente ha cambiado", dijo al New York Times
Charles Haynes, miembro del Freedom Forum y experto en libertad
religiosa. Sin embargo, precisó, "incluso esta corte tendrá
dificultades para justificar" la ley de Luisiana.
La norma aprobada en el estado prevé que los Diez
Mandamientos se expongan a partir de 2025 en todas las aulas,
desde la primaria hasta la universidad.
Los carteles se pagarán con donaciones privadas y no con
dinero público, y no podrán tener un tamaño inferior a 28 x 35,5
centímetros.
Los caracteres utilizados deben ser "grandes y legibles", y
los Diez Mandamientos deben ir acompañados de tres párrafos
explicativos donde se note su "importante papel en la educación
pública estadounidense durante casi tres siglos".
Esto es para aclarar la tesis subyacente de los partidarios
de la iniciativa, es decir, el hecho de que los Diez
Mandamientos no son solo un texto religioso, sino también un
documento histórico, teniendo en cuenta que las instrucciones
dadas a Moisés en el libro del Exodo tuvieron una influencia
significativa en la ley de los Estados Unidos.
Sin embargo, la explicación no convence a los críticos, que
consideran que la ley es una clara violación de la Constitución.
"Los estudiantes de todas las religiones o de ninguna
deberían sentirse bienvenidos en las clases", afirmaron en una
nota la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), junto con
Estadounidenses Unidos por la Separación de la Iglesia y el
Estado y la Fundación para la Libertad Religiosa, destacando que
la ley "viola el derecho fundamental de los estudiantes y sus
familias a la libertad religiosa".
Luisiana es el primer estado norteamericano en aprobar una
ley similar después de que la Corte Suprema rechazara en 1980
una normativa similar en Kentucky.
Intentos similares fracasaron recientemente en Mississippi,
Oklahoma y Texas, otros estados republicanos.
En Utah, una norma similar se redujo significativamente al
agregar los Diez Mandamientos a la lista de principios que deben
incluirse en los planes de estudios escolares. (ANSA).