(ANSA) - LEIPZIG, 20 GIU - "Está mejor, pero decidiré mañana
si juega o no", afirmó el entrenador de Francia, Didier
Deschamps, al referirse a la presencia frente a Países Bajos del
goleador Kylian Mbappé, quien se recupera de la fractura del
tabique nasal que sufrió frente a Austria y está en duda para el
duelo que cerrará la jornada el viernes en Leipzig en la
Eurocopa de Alemania.
"Todo marcha por el camino correcto, pero las consecuencias de
la lesión siguen presentes", destacó sobre el delantero del Real
Madrid que hoy volvió a realizar un entrenamiento diferenciado
con una máscara de protección en el rostro con los colores de la
bandera de Francia.
Deschamps se mostró medianamente optimista de poder contar con
su gran figura al afirmar que "todo parece evolucionar en
sentido positivo, pero veremos".
"No estoy particularmente preocupado", agregó el DT, que cuenta
con jugadores como para reemplazar a Mbappé si fuese necesario
ante Países Bajos, que al igual que Francia ganó en el estreno
(ante Polonia) y podría asegurarse el pasaje anticipado a
octavos de final también en caso de un nuevo triunfo.
Olivier Giroud, goleador histórico de la selección y quien
jugará la próxima temporada en la MLS estadounidense tras su
paso por Milan, aparece como candidato para reemplazarlo y
acompañar a Antoine Griezmann y a Osumane Dembelé en ataque,
pues Marcus Thuram, campeón del fútbol italiano con Inter, no se
lució en el debut y podría quedar relegado.
Kolo Muani y Bradley Barcola son otras opciones para sustituir
al delantero "merengue", cuya ausencia "obliga a todo el equipo
a adaptarse", según advirtió Griezmann, al reconocer que Mbappé
"es uno de los mejores delanteros del mundo y todo cambia si no
está".
Deschamps afirmó que "el partido con Países Bajos será diferente
a Austria" y el mediocampista neerlandés Georginio Wijnaldum
coincidía en que será "un reto importante ante un rival que nos
derrotó las dos veces que chocamos en la fase de clasificación a
esta Eurocopa, pero debemos creer en nuestras fuerzas".
"En esos partidos quedó claro la calidad que tienen como equipo
e individualmente", agregó el jugador del saudita Al-Ettifaq con
pasado en Liverpool y en Roma que compartió plantel con Mbappé
en París Saint-Germain y dijo: "En este momento, Kylian es
probablemente el mejor jugador del planeta y lo demuestra en la
cancha", al augurarle que se recupere pronto.
Quien está recuperado y en condiciones de jugar tras perderse el
partido que Polonia perdió con Países Bajos es el goleador
Robert Lewandowski, que llegó con una dolencia a la Eurocopa y
tendría mañana al menos unos minutos en cancha, siempre y cuando
el técnico Michal Probierz no decida preservarlo para el choque
decisivo frente a Francia del martes.
Todo hace suponer que el artillero del Barcelona y de la
selección polaca (para la que convirtió 82 goles), lesionado en
el último amistoso de preparación frente a Turquía, jugará
mañana en Berlín, aunque tal vez no lo haga desde el inicio ante
un rival obligado a ganar también para no perder el tren.
Otro que volvería al seleccionado polaco tras la lesión que
sufrió frente a Turquía es el mediocampista Pawel Dawidowicz,
mientras que Jakub Piotrowski, que terminó con una dolencia el
domingo ante Países Bajos, también sería de la partida al igual
que el zaguero Bartosz Salamon.
"Perdimos el primer partido, pero sigo siendo positivo. Queremos
quedarnos las dos semanas en Alemania porque no vinimos a jugar
tres partidos y volver a casa", destacó el arquero polaco,
Wojciech Szczesny, de Juventus, al reconocer que Lewandowski
"quizás no esté para jugar los 90 minutos", pero si lo hace
durante algunos minutos "nuestros rivales no estarán contentos
de verlo".
"Suponemos que (Lewandowski) será titular y, de ser así, nuestro
objetivo será evitar que le llegue el balón tantas veces como
sea posible", destacó el técnico alemán del seleccionado de
Austria, Ralf Rangnick, al reconocer "el carácter de
eliminatorio que tiene este partido para ambos equipos, pues una
victoria te deja con muchas chances de avanzar a octavos y el
empate no le sirve a ninguno".
Por el pasaje a octavos saldrá al ruedo en el primer partido de
la jornada, que se jugará en Dsseldorf, la Eslovaquia de
Francesco Calzona, técnico del Napoli en la pasada temporada que
pese al triunfo en el debut frente a Bélgica por 1-0 mostró
tener los pies sobre la tierra y no se fía de Ucrania, obligada
a ganar tras la derrota con Rumania por 3-0 en la primera fecha.
"La euforia duró apenas unas horas, pero los tres puntos no
bastan para avanzar a la próxima ronda", destacó Calzona, según
el cual "nuestra fuerza radica en la humildad y daremos el 110
por ciento para darle una alegría a nuestra gente. Estamos
felices porque muchos eslovacos nos acompañan en esta Eurocopa",
afirmó.
También espera darle una alegría a su pueblo el volante
ucraniano Volodymir Brazhko, astro de 22 años del Dínamo Kiev,
para que sus compatriotas puedan festejar en medio de la guerra
con Rusia que desangra a su país desde febrero de 2022.
"Debuté con la selección hace apenas tres meses y fue increíble.
Soñaba con jugar este torneo desde hacía mucho tiempo y lo estoy
disfrutando", afirmó al reconocer que "somos conscientes de que
enfrentaremos a un rival organizado y difícil, que sabe
defenderse bien y lastima de contragolpe".
Un diagnóstico que compartió el técnico de Ucrania, Serhiy
Rebrov, al considerar que su equipo no puede permitirse otro
paso en falso si pretende seguir con vida en el torneo frente a
un rival que fue "capaz de vencer a Bélgica".
"Espero que salga un gran partido y que podamos ganarlo después
de la ducha fría que nos dio la primera fecha", comentó Rebrov,
a quien sus dirigidos le pidieron dejarlos a solas luego de
aquella derrota para discutir en los vestuarios qué fue lo que
pasó, algo que el DT consideró como "absolutamente normal" y
hasta saludable.
"Espero que todos hayamos aprendido la lección después de lo
sucedido, individualmente y como equipo", coincidió el zaguero
Oleksandr Zinchenko, jugador del Arsenal, según el cual "ahora
debemos dar vuelta la página y enfocarnos en Eslovaquia, "un
rival realmente difícil ante el cual debemos dar batalla en
todos los sectores de la cancha". (ANSA).