(ANSA) - VICENZA 21 JUN - Roberto Baggio fue asaltado y
herido por unos delincuentes anoche en su casa de Altavilla
Vicentina, en Vicenza, en la región del Véneto, mientras él y su
familia veían el partido España-Italia por la Eurocopa.
Según sitios de noticias locales, Baggio intentó detener a
los delincuentes (al parecer eran cinco y estaban armados), pero
uno de ellos lo golpeó en la frente con la culata de un arma.
El ex ganador del Balón de Oro y su familia fueron
encerrados en una habitación mientras los ladrones robaban la
casa. Cuando la banda salió de la propiedad, Baggio derribó la
puerta y llamó a la policía.
Los Carabinieri de la Compañía de Vicenza acudieron al
lugar, alertados por el propio Baggio.
El exfutbolista, natural de Caldogno, en Vicenza, vive desde
hace unos 15 años en su finca agrícola, situada en una colina
que domina la Altavilla Vicentina. La villa está aislada y se
encuentra en el centro de una gran parcela de campo y bosque.
Roberto Baggio vive con su esposa Andreina y sus tres hijos.
"En primer lugar, mi familia y yo queremos agradecer a
todos por el gran cariño que hemos recibido. De verdad,
gracias", dijo la ex estrella a ANSA, a través de su histórico
representante, Vittorio Petrone.
"En circunstancias similares, agregó, puede pasar cualquier
cosa, y afortunadamente la violencia que sufrí solo generó
algunos puntos en mi persona, moretones y mucho miedo. Ahora
toca superar el miedo".
La policía inspeccionó hoy la propiedad e investiga el robo.
El propio exfutbolista está presente junto a los militares.
Baggio fue atendido durante la noche en el servicio de urgencias
de Arzignano (Vicenza), localidad no lejos de Altavilla
Vicentina.
Según se supo, los médicos le aplicaron algunos puntos en la
cabeza debido al golpe que sufrió por parte de uno de los
bandidos. Una vez dado de alta, también durante la noche, Baggio
fue interrogado en el cuartel de los Carabinieri de Vicenza, que
está llevando a cabo una investigación sobre el episodio.
Al final de la investigación, que también incluyó la
búsqueda del gran terreno alrededor de la villa, Roberto Baggio
abandonó su propiedad en coche. Junto a él, al volante, estaba
su hijo Mattia.
En nombre del gobierno de Roma reaccionó el vicepremier y
ministro de Transportes, Matteo Salvini. "Vergonzoso. Un abrazo
a Roberto Baggio y a su familia. Tengo la máxima confianza en
las fuerzas del orden: espero que estos criminales sean
identificados lo antes posible y castigados sin indulgencia",
escribió en sus redes sociales".
El presidente de la región del Véneto, Luca Zaia, expresó su
"cercanía y solidaridad con Roberto Baggio y su familia, y estoy
seguro de poder enviarle el abrazo de todos los venecianos a los
que hizo soñar con su incomparable habilidad sobre el césped de
los campos internacionales".
"Esperamos - prosigue Zaia - que el campeón simbólico de
nuestro fútbol y de nuestra región, una persona que sentimos
cercana y amiga, pueda recuperarse pronto junto con su familia
de esta mala noche y confiamos en que los delincuentes pronto
puedan ser llevados ante la justicia". (ANSA).