Por Domenico Palesse
(ANSA) - ROMA 26 JUN - El nuevo paquete de ayuda a Ucrania
está listo sobre la mesa del gobierno de Giorgia Meloni. Mañana
el Ministro de Defensa de Italia, Guido Crosetto, presentará el
contenido al Comité Parlamentario para la Seguridad de la
República (Copasir), enumerando las armas y equipos que Italia
se dispone a enviar a Kiev.
Es casi seguro que la lista, obviamente clasificada,
incluirá uno de los sistemas antimisiles SAMP-T, como ya anunció
en los últimos meses el Ministro de Asuntos Exteriores, Antonio
Tajani.
La incógnita, que también pesa sobre la clara oposición del
ala mayoritaria de la Liga Norte, está relacionada con el envío
de misiles. De hecho, según numerosas fuentes, Italia podría
suministrar a Kiev Storm Shadows, armas de largo alcance de
carácter ofensivo que, en teoría, también podrían llegar a
Rusia, incumpliendo el principio repetidamente reiterado por el
Gobierno de suministrar armas a Ucrania solo para su propia
defensa.
Por lo tanto, se espera una primera aclaración mañana mismo,
cuando Crosetto, como de costumbre, presentará al Comité de
Seguridad Nacional la lista de armamentos listos para partir
hacia Kiev. Uno de ellos incluirá uno de los SAMP-T que acaba de
regresar a Italia desde Kuwait, respondiendo así también a las
insistentes peticiones del gobierno ucraniano de una ayuda más
sustancial para defenderse de la invasión rusa.
En los últimos días, el propio Ministro de Asuntos
Exteriores, Dmytro Kuleba, había reiterado la necesidad de Kiev
de dotarse de "un mayor número de sistemas de defensa aérea
Patriot y SAMP-T". De hecho, se trata del segundo sistema
anti-misiles enviado a Ucrania, tras el enviado justo después
del inicio del conflicto junto con Francia.
Lo que se pregunta no solo una parte de la oposición, con el
M5S a la cabeza, sino también la Liga, es la posibilidad de que
Italia también ponga a disposición sistemas de misiles
ofensivos. En los últimos días, el Ministro de Asuntos
Exteriores británico, Grant Schapps, informó que Italia ya había
suministrado misiles de crucero Storm Shadow/SCALP que pueden
impactar a una distancia de 500 kilómetros y, por tanto, también
a Rusia.
Declaraciones que no fueron confirmadas ni desmentidas por
el Palazzo Chigi, pero que irritaron al líder de la Liga Norte,
Matteo Salvini. "La Liga -afirmó- no votará ningún decreto para
enviar armas a Ucrania si no estoy seguro de que ningún arma
italiana atacará a Rusia y desencadenará la Tercera Guerra
Mundial".
En total, Italia dispone de unos 200 Storm Shadows,
adquiridos en 1999 a un precio que entonces rondaba los 2,5
millones de euros cada uno, pero que hoy se ha quintuplicado. Es
el arma ofensiva más poderosa y con mayor alcance que fue
suministrada a las fuerzas militares italianas.
En los últimos meses, el Gobierno ha intentado varias veces
echar agua al fuego de la polémica, negando los rumores de envío
de misiles.
"No podríamos hacerlo incluso si la gran mayoría de los
países de la OTAN así lo decidieran - es el razonamiento -. Esto
no está permitido por la Constitución y pondríamos en riesgo al
gobierno".
Declaraciones, desmentidos y aclaraciones que chocan con el
hermetismo que cubre la lista de armas que acabarán mañana sobre
la mesa de Copasir. Un secreto que el propio ministro Crosetto
está pensando en revisar y, tal vez, incluso eliminar. (ANSA).