(ANSA) - LA PAZ 26 JUN - El presidente boliviano, Luis Arce,
expresó hoy su repudio al accionar de las tropas de las Fuerzas
Armadas, dirigida por ex comandante general del ejército
boliviano Juan José Zúñiga, en su intento de llevar adelante un
golpe de Estado contra Bolivia, mientras la Central Obrera
Boliviana (COB), manifestó su apoyo al gobierno y decretó un
paro por tiempo indefinido.
"No podemos permitir que una vez más que intentonas
golpistas se lleven vidas bolivianas, queremos exhortar a todos
a que defendamos la democracia. Aquí estamos firmes con todo el
gabinete para impedir esto", dijo Arce en un mensaje en cadena
nacional.
Gran número de militares se congregaron en Plaza Murillo,
donde se encuentra el Palacio del Quemado, en su intento por
tomar esa sede de gobierno y poner fin a 42 años de democracia.
"No vamos a permitir un golpe de Estado, Que viva el pueblo
boliviano!!! Que viva la democracia!!", declaró el presidente.
Mientras tanto, la Central Obrera Boliviana (COB) repudió
hoy las medidas adoptadas por las Fuerzas Armadas en ese intento
de golpe de Estado contra el presidente Arce.
"Ante estos hechos, la COB hace saber su pronunciamiento, su
repudio ante estos actos anticonstitucionales. La Central Obrera
pide el respeto al pueblo soberano que ha elegido a su
gobierno", dijo Juan Carlos Guarachi, secretario de la principal
organización sindical.
Y agregó: "De no hacer caso a estas medidas, tomaremos las
acciones necesarias, tomeramos la plaza Murillo (en el centro de
La Paz, NDR) para recuperar nuestra democracia".
"Por eso estamos unidos y llamamos a todos los sectores
afiliados o no. Llamamos a la reflexión a las fuerzas armadas.
Respeten al pueblo, no es a una persona, el pueblo ha elegido a
su gobierno y hay que saber respetar el voto democrático",
amplió el sindicalista.
"No vamos a permitir estos intentos de golpe de Estado. Si
tenemos que estar en las calles lo vamos a hacer. Es por eso que
decretamos una huelga general indefinida", sentenció y luego
bramó: "Fuera los golpistas!".
El ex comandante general Zúñiga, destituido el martes tras
amenazar públicamente al expresidente Evo Morales, declaró que
pronto se nombrará un nuevo gobierno porque "el país no puede
seguir así".
"Las fuerzas armadas pretendes reestructurar la democracia",
afirmó Zúñiga a los periodistas y afirmó que liberarán a todos
los presos políticos. "Queremos restablecer la democracia.
Nuestros niños no tienen futuro. Por el bienestar y el progreso
de nuestro pueblo", sentenció. (ANSA).