Por Mónica Uriel
(ANSA) - MADRID 27 JUN - Para "cerrar las heridas" del Perú
de Sendero Luminoso "no basta que pase el tiempo, son necesarias
políticas y reparaciones, no solo económicas sino también
simbólicas", dice a ANSA la escritora peruana Karina Pacheco.
A su juicio, estas "heridas no resueltas" regresan al
presente en forma de "racismo, exclusión y abuso de poder", que
es lo que ha retratado en su libro "El año del viento", Premio
Nacional de Literatura 2022 en Perú, y que estos días promociona
en España con motivo de su publicación en este país.
Esas resonancias "siguen siendo muy presentes y se han
manifestado de forma muy dramática en los últimos años, como en
2023, cuando en las protestas sociales murieron 50 personas y el
gobierno que dio las órdenes sigue ahí. Pero hay total
impunidad".
En Perú, hasta 2019 "se vivía la ilusión de que éramos un
país casi rico, pero los hospitales y la sanidad pública habían
sido totalmente abandonados, y cuando llegó la pandemia se vio
que ese país que tenía la pretensión de ser rico, tenía los pies
de barro".
Pacheco (Cusco, 1969) defiende a la hora de cerrar heridas
la importancia de "la memoria a través de la educación" y en
este sentido cita a Alemania como ejemplo de "trabajo de memoria
profundo y ejercicios de memoria simbólica".
En los libros de texto de Perú "cuando aparece Sendero
Luminoso no aparecen los crímenes que cometieron las Fuerzas
Armadas. El 80% de la sociedad sabe y reconoce realmente qué
sucedió. Pero hay la pretensión de un 20% de que eso se borre y
crear una historia donde solo se hable del terrorismo del
Sendero Luminoso y no del terror y abuso del poder cometidos por
las Fuerzas Armadas".
Pacheco cree que "igual que está habiendo censura contra el
cine que aborda los temas de violencia política contando los
abusos cometidos desde el Estado, tarde o temprano querrán
empezar a censurar libros".
En "El año del viento", ambientado en1981, la autora trata
los inicios de la violencia política desde el presente de la
pandemia de 2020 cuando la protagonista, Nina, se encuentra con
Bárbara, de quien no sabía nada desde hace 40 años y que le
llevará hasta un pueblo enclavado en los Andes especialmente
castigado durante los años de violencia política.
Para Pacheco, "lo peor de Sendero Luminoso fue el dogmatismo
sangriento, convertir a una parte del país como enemiga y creer
que la destrucción es la base para construir algo".
La violencia "se ha nutrido de que vivimos en un país que
excluye a los más pobres. El racismo sigue siendo vigente y el
Estado no ha aparecido en las zonas más olvidadas, por ahí se
filtró Sendero Luminoso y el Estado dio una respuesta brutal con
un desprecio total a los más pobres".
A su juicio, "la democracia tiene que hacer una apuesta
clara por lo público, luchar contra la discriminación y por la
igualdad de oportunidades" pero, después de la Comisión de la
Verdad y la Reconciliación de 2003 "no se hizo nada por tener un
país más democrático, al contrario".
El neoliberalismo, subraya, "ha entrado de forma salvaje en
América Latina y Perú es uno de sus mayores exponentes".
La autora aboga por "una renovación general de la política
porque la corrupción se ha instalado como práctica normalizada
no solo en la política nacional, sino también en segmentos
locales y regionales". (ANSA).