(ANSA) - ROMA, 27 GIU - El presidente de la Federación
Italiana de Fútbol (FIGC), Gabriele Gravina, cuestionó la
enmienda que Giorgio Mulé, diputado de Fuerza Italia (FI),
presentó al decreto del deporte que habilita una autonomía de la
Serie A.
"No conocíamos la enmienda, nos enteramos esta mañana. Pero no
es una bofetada para mí. No es una cuestión personal, desde el
punto de vista institucional siempre defenderé a esta federación
y como miembro del Consejo del Comité Olímpico Italiano (CONI)
defenderé el deporte italiano", aseveró Gravina.
Según la enmienda de Mulé, las ligas profesionales deben
"disfrutar de plena autonomía estatutaria, reglamentaria,
organizativa y de gestión" y además "tener derecho a un peso
electoral en las asambleas y a una representación en los órganos
de gobierno de las federaciones deportivas nacionales
pertinentes, adecuada a la aportación económica aportada al
sistema deportivo".
"No es una guerra personal. La vivo con la misma serenidad, es
una provocación y démosle el peso adecuado. Si creemos que el
fútbol italiano debe ser evaluado sólo por su peso económico,
entonces todas las demás dimensiones se mortifican, como la del
voluntariado", agregó el titular de la FIGC.
Gravina se refería a la modificación del decreto deportivo
propuesta por Mulé considerada admisible en la comisión de
cultura que puede garantizar, entre otras cosas, la autonomía de
la Serie A según el modelo de la Premier League.
"Ya he expresado mis dudas y creo que no me equivoqué, dado que
hay muchas enmiendas, algunas mayoritarias, que son supresoras o
modificativas", completó Gravina sobre la comisión de control de
los clubes profesionales del fútbol y de básquet italiano
impulsado por el gobierno de Giorgia Meloni.
Por su parte, Mulé explicó que la enmienda que presentó "es una
intervención encaminada a reconocer el papel y el peso que
tienen las ligas deportivas profesionales" que actualmente
"están infrarrepresentadas, como la Liga de la Serie A, en
comparación con lo que expresan y pagan". (ANSA).