(ANSA) - CARACAS, 28 OTT - Las consecuencias "devastadoras"
de la minería ilegal de oro para el medio ambiente, la salud y
los derechos humanos en la Amazonía están en el centro de un
documento publicado por la ONG venezolana SOS Orinoco.
El documento, elaborado con la colaboración de otras ONG
activas en Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador y Perú, denuncia
en particular los efectos nocivos resultantes del uso de
mercurio por parte de los mineros ilegales que trabajan en la
selva tropical.
Venezuela - resalta SOS Orinoco - no es un país productor de
este metal por lo que, aunque su uso está legalmente prohibido,
constantemente se importa de contrabando desde el extranjero.
Se estima que en Venezuela se utilizan al menos 15 toneladas
de metal al año para estos fines.
Según la ONG, las grandes concentraciones de mercurio
encontradas en los cuerpos de los habitantes de la región de El
Callao, especialmente de los indígenas, son la causa de la alta
incidencia de alergias, daños pulmonares, insuficiencia renal,
respiratoria y cardíaca, así como la elevado número de embarazos
problemáticos y el nacimiento de numerosos niños que padecen
síndrome de Down, autismo, discapacidades motoras, sordera y
otras deficiencias físicas, debido a la intoxicación por este
metal.
Las poblaciones indígenas sufren altas tasas de desnutrición
debido a la inseguridad alimentaria asociada a la minería, que
mata animales y peces.
Además, la minería es una de las causas fundamentales de la
deforestación y de las violaciones de los derechos humanos en
detrimento de las poblaciones locales, expuestas a los abusos de
los mineros, a menudo vinculados a grandes organizaciones
criminales transnacionales. (ANSA).