Por Marcos Romero
(ANSA) - CIUDAD DE MEXICO, 01 NOV - El primer mes en el poder
de la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum se cumplió en medio
de más sombras que luces, sobre todo debido a la "herencia
envenenada" que recibió de su antecesor y mentor político Andrés
Manuel López Obrador, una reforma al Poder Judicial que puso a
prueba su fortaleza.
Los analistas han elogiado el estilo de gobernar de la
primera mujer jefa de Estado en 200 años de historia, muy
diferente de López Obrador, sobre todo por ser más una persona
más planificada, dado su perfil académico respaldado por sus
estudios de doctorado en energía ambiental, menos retórica y
polarizante y más pragmática.
Sin embargo, algunos comentaristas y críticos, sobre todo
de la oposición, insisten en que al ser puesta a prueba por sus
adversarios ha mostrado "menos colmillo" y más debilidad que un
hombre con gran carisma y una gran habilidad para el oficio
político como quien le precedió en el cargo.
"Unos dicen que es autoritaria y que en el fondo es aún más
radical que López Obrador, otros la acusan justamente de lo
contrario y afirman que es demasiado débil y que el escenario
terminará desplomándose ante la ausencia de un mando firme como
el que ejerció su predecesor", afirmó el analista Jorge Zepeda
Patterson.
"Lo cierto es que, tras apenas un mes de los 72 que le
tocará gobernar, los críticos no se han aguantado las ganas de
certificar, de una vez y para siempre, el supuesto fracaso del
gobierno de Claudia Sheinbaum. No pudieron apuntarse esa
victoria en el sexenio anterior y, por lo visto, ahora han
querido comenzar más temprano", escribió en el diario El País.
"Un primer mes de caos" y "plagado de contradicciones,
acusaciones cruzadas, revueltas silenciosas, callados desafíos y
ajustes de último momento", resumió por su parte el escritor
Jorge Volpi, quien dijo que fue "un mes lleno de hilos sueltos".
"Ningún gobierno entrante está exento de cometer errores,
menos uno que ha heredado y vuelto suya una de las acciones más
caprichosas y absurdas imaginables para comenzar su andadura: la
incómoda reforma judicial dictada por una simple ocurrencia y
los postreros deseos de venganza de López Obrador, dijo Volpi,
en referencia a la reforma judicial.
Desde distintos frentes han surgido incendios de mayor o
menor magnitud que Sheinbaum ha debido intentar extinguir sin
mucho éxito.
Uno de ellos proviene del ámbito de la justicia, por la
aprobación semanas antes de su llegada al poder de una reforma
al poder judicial que principalmente somete al escrutinio de las
urnas a más de 2.000 jueces federales, a los magistrados y
miembros de la Corte.
Varios jueces emitieron resoluciones para frenar la
aplicación de las enmiendas, pero el gobierno se niega a
acatarlas argumentando que la ley y diversas jurisprudencias
establecen que son incontrovertibles e incluso Sheinbaum
promovió en el Congreso una recién aprobada reforma de
"supremacía constitucional", que pone fin a más recursos de
este tipo.
El otro gran desafío durante su primer mes fue el del
crimen organizado, al que prometió combatir atacando los
fundamentos de la violencia y con énfasis en labores de
inteligencia.
Hace unos días, el ministro de Seguridad Omar García
Harfuch señaló que en este mes han sido detenidas por delitos
"de alto impacto" 824 personas, entre ellas "miembros de alto
rango de cárteles de drogas" y confiscó 33 toneladas de drogas.
El analista Carlos Pérez Ricart estima que "para aliviar
el conflicto criminal que vive México deberá predominar la
táctica sobre la impericia, la estrategia sobre el caos".
(ANSA).