(ANSA) - MADRID 1 NOV - El ejército se desplegó hoy en
Valencia para reforzar el dispositivo de emergencia puesto en
marcha tras las lluvias torrenciales que causaron al menos 158
fallecidos, mientras que decenas de personas siguen
desaparecidas.
Un total de 500 militares se suman a los 1.200 que ya
estaban trabajando desde el martes en la zona y se incorporarán
"los que hagan falta", dijo hoy la ministra de Defensa,
Margarita Robles.
La magnitud de la tragedia todavía es difícil de calcular y
la cifra de fallecidos es provisional porque "hay lugares en los
que hay vehículos que están unos encima de otros, con personas,
familias, que pueden estar dentro", dijo.
También se buscan personas que pudieran estar en sótanos o
plantas bajas y se trabaja en abrir carreteras para permitir el
transporte de alimentos y agua a algunas poblaciones de la
provincia de Valencia que están "absolutamente aisladas",
apuntó.
El alcalde de Sedaví, una de las localidades aisladas, José
Francisco Cabanes, lanzó un llamado de auxilio: "La prioridad
ahora es retirar los cadáveres y limpiar las calles para evitar
infecciones y enfermedades".
Se calcula que hay 360.000 vecinos sin agua potable y 78.000
sin luz en la provincia de Valencia.
La Feria de Valencia ya está acondicionada para recibir los
cuerpos de las víctimas mortales.
El temor a un posible desabastecimiento ha dejado vacías las
estanterías de muchos supermercados de la zona.
Mientras, cientos de voluntarios llevan a pie desde la
ciudad de Valencia alimentos de primera necesidad a las zonas
afectadas. (ANSA).