Por Anna Lisa Rapan…
(ANSA) - MADRID, 02 NOV - Fueron los gritos los que la
salvaron. La fuerza de la desesperación que incluso después de
la pesadilla de tres días mantuvo a una anciana atrapada en su
coche en un paso subterráneo inundado en Benetusser, un pueblo
de la Comunidad Valenciana entre los más afectados por las
inundaciones. No dejó de gritar hasta que llegaron los
rescatistas y la trajeron de regreso a la superficie,
confiándola al cuidado de personal médico.
Es una de las muchas historias de esperanza que son casi
milagrosas mientras todavía se excava entre los escombros y el
barro en esta región desgarrada de España, donde el número de
muertos sigue aumentando mientras que el número de personas
desaparecidas también corre el riesgo de ser muy alto, aunque
las cifras oficiales no se publican. El diario El Meridiano
reconstruye lo sucedido recogiendo los testimonios de los
operadores de Protección Civil que tienen su punto de referencia
para la zona en la localidad de Moncada y que participaron en el
rescate.
La mujer permaneció encerrada en su coche durante tres días,
después de quedar atrapada en medio de la ciudad, que
rápidamente se volvió inaccesible después de los aluviones y
posteriores inundaciones. Con el paso de las horas, la
gigantesca masa de agua desplazó objetos, escombros pesados ;;e
incluso vehículos. Por eso, cuando los servicios de emergencia
divisaron a la mujer en su vehículo había otros coches, ahora
destrozados, obstruyendo el paso. Casi un milagro, de hecho,
para una operación de rescate muy difícil, pero cuyo resultado
es un signo de esperanza para las personas que quizás aún estén
vivas pero atrapadas en la zona.
Y por ello, Martín Pérez, jefe de Protección Civil de
Moncada y concejal municipal de esta localidad, se mostró
visiblemente conmovido al informar los detalles del rescate: "A
los tres días encontramos a una persona con vida dentro de un
automóvil". Las imágenes del anuncio dado por Pérez a sus
compañeros en el centro de operaciones quienes respondieron con
estruendosos aplausos circularon en las redes sociales y diarios
digitales.
La localidad de Moncada se convirtió en uno de los centros
operativos de Protección Civil implicada en la zona, que
estableció su base en el polideportivo municipal con 400
voluntarios llegados de toda España. Hay un pabellón municipal
donde confluyen socorristas de las comunidades de Cataluña,
Madrid, Murcia, Navarra, Andalucía y Aragón. Llegan equipados
con suministros, incluso para su propia subsistencia personal,
así como en forma de ayuda para los desplazados. (ANSA).