(ANSA) - ROMA 10 NOV - Máximas ganas de cerrar, con los
métodos aún por establecer, mientras la Unión Europea espera.
Seguro. Y desde Alemania llega un poco de optimismo. Esta es la
línea común de las partes implicadas en el litigio que se
prolonga desde hace casi una semana entre el ministerio de
Economía de Italia y Lufthansa en torno al expediente ITA por el
descuento solicitado por la empresa alemana sobre el precio de
compra del segundo tramo de la aerolínea italiana y que continúa
de manera constante.
El tiempo se acaba para encontrar una solución y hay aún
más hipótesis sobre la mesa. Pero aunque es necesario tener
precaución, fuentes alemanas explican que "parece que se ha
llegado a un acuerdo sobre 2/3 de los temas, el tercio restante
aún está por negociarse".
Lufthansa, explican las mismas fuentes, ha decidido no
insistir en las solicitudes iniciales de descuento para el
segundo tramo del ITA: la sensación es que la esperada luz verde
podría llegar el lunes por la mañana, para luego finalizar el
documento en las horas siguientes. E incluso en Bruselas hay
"confianza" en que los últimos obstáculos entre el Ministerio y
Lufthansa se resolverán "en las próximas horas" con el envío del
plan final firmado por todos los protagonistas de las
negociaciones.
Por otra parte, tras superar una desorientación inicial
provocada por el bloqueo de las negociaciones entre el
Ministerio y el gigante alemán a principios de semana, el clima
en la Comisión Europea en los últimos días se ha mantenido
siempre positivo, con vistas a "un final feliz".
Las mismas fuentes siguen señalando que el éxito de la
boda está solo en manos de las partes, pero también que en estos
días de secreto Bruselas siempre ha estado en contacto con las
autoridades italianas: el expediente está en manos de Marcello
Sala, Director del Departamento de Economía del ministerio, y de
la empresa Carsten Spohr.
Se formularon varias hipótesis. Además de la posibilidad
de un acuerdo sobre el importe del descuento (con un
perfeccionamiento de las solicitudes de Berlín y una apertura de
Roma), el camino podría haber sido el de una prórroga con la
revisión del calendario global con la compra ahora de una cuota
menor como se esperaba y una negociación posterior, aplazando el
tema.
Y también se planteó la hipótesis de un arbitraje para
fijar el precio. Pero ya no parece descartable que mañana todo
el asunto esté cerrado y los documentos firmados por el
Ministerio lleguen a Bruselas en respuesta a una flexibilización
de las peticiones de Berlín. Por otro lado, es indiscutible que
el interés predominante de ambas partes es llegar al final de
esta operación que comenzó hace más de 2 años.
El Jubileo está a la vuelta de la esquina y se prometen
ofertas de oro para todos. Un papel importante es también el de
la Comisión Europea, que ha dedicado mucho tiempo y esfuerzo al
expediente. En su análisis final, la autoridad antimonopolio de
la UE evaluará los compromisos implementados por las partes para
respetar las condiciones acordadas en el acuerdo político
alcanzado el 3 de julio. (ANSA).