Por Alberto Zanconato
(ANSA) - ROMA, 13 NOV - Mientras las diplomacias esperan
observar en el terreno la iniciativa de paz de Donald Trump,
Rusia intensifica los embates contra Ucrania. Por primera vez en
más de dos meses Kiev fue sometida a un bombardeo combinado de
drones y misiles, con una población obligada a refugiarse en las
estaciones del Metro.
En tanto, el canciller ruso Serguei Lavrov impugnó la
hipótesis de un stop a las hostilidades en la actual línea del
frente y los servicios secretos ucranianos reivindicaron el
asesinato en Sebastopol, en Crimea, de un oficial acusado de
haber ordenado en el pasado otras incursiones misilísticas sobre
diferentes ciudades.
Las palabras de Lavrov impactan como una ducha fría en los
esfuerzos de paz del presidente electo norteamericano que, según
la cadena Fox, se apresta a nombrar un enviado especial para las
negociaciones entre Moscú y Kiev.
El retorno de Trump a la Casa blanca, dijo el jefe de la
diplomacia rusa, probablemente no cambiará el enfoque de Estados
Unidos sobre el conflicto porque el objetivo de Washington es el
de "debilitar a Rusia".
Empero, Lavrov también envió un mensaje más concreto, y no
necesariamente contrario a las tratativas, entrando por primera
vez en mérito a las propuestas que los medios occidentales
atribuyeron a Trump. Entre ellas, el congelamiento de las
hostilidades a lo largo de la actual línea de contacto. Moscú es
contrario, recalcó el ministro de Relaciones Exteriores ruso,
porque ello significaría volver a proponer "los acuerdos de
Minsk en una nueva confección, o incluso peor".
En ese momento Kiev y otros siete regiones fueron golpeadas
por nuevos ataques rusos. Agresiones que coincidieron con la
visita a Bruselas del secretario norteamericano de Estado,
Antony Blinken, que prometió "una respuesta firme" al
involucramiento de tropas norcoreanas junto a las rusas.
El Departamento de Estado de Washington dijo que son unos
10.000 los soldados enviados por Pyongyang a Rusia -una cesión
no desmentida por Moscú- y que la mayor parte "comenzó a
comprometerse en operaciones de combate" junto a los rusos
contra las fuerzas de Kiev que desde hace tres meses ocupan una
pequeña posición en la región de Kursk.
A más de expulsar a los ucranianos de su territorio, Moscú
parece decidido a ampliar la ofensiva a las regiones del este de
Ucrania para presentarse en cualquier negociación desde una
posición de fuerza. Asimismo, algunos blogueros militares
también informan de avances en la región de Zaporiyia, más al
oeste. El ministerio de Defensa informó de la conquista de otro
pueblo, Rivnopil, situado en la región de Donetsk, pero en
dirección oeste, hacia el oblast de Zaporiyia.
La administración militar de Kiev dijo que, por una vez,
luego de 73 días la capital sufrió un ataque combinado de
misiles y drones, que duró más de dos horas. La Aeronáutica
militar precisó que en los raids sobre la ciudad y otras siete
regiones se emplearon un total de 90 vehículos aéreos sin
piloto, de loas cuales 37 fueron abatidos, y seis misiles,
cuatro de ellos fueron interceptados. No se señalaron muertos o
heridos en la capital, pero en Beryslav, en la región meridional
de Jérson, el gobernador comentó que una mujer perdió la vida
como consecuencia de un ataque con drones.
Los servicios secretos militares (SBU) asumieron, en tanto,
la paternidad del atentado en el que falleció un oficial de la
flota rusa del Mar Negro, al explotar su automóvil en
Sebastopol, en la Crimea anexada por Rusia.
Conforme a diversos bloqueros rusos, el miltiar Valery
Trankovsky, fue en el pasado comandante de la 41ø Brigada de las
naves y embarcaciones portamisiles. Y en ese cargo ordenó varios
bombardeos contra ciudades ucranianas, entre ellas, Vinnytsa,
donde en julio de 2022 fallecieron 20 personas. Por tanto,
agregó la fuentes, el oficial eera "un objetivo legítimo según
las leyes de guerra". El Comité investigador ruso puntualizó que
abrió una investigación por aquello que definió como "un acto
terrorista".
Otro oficial de Marina ruso, Stanislav Rzhitsky, también él
acusado por los ucranianos de haber tomado parte en el bombardeo
de Vinnytsa como comandante de un submarino, fue eliminado en
julio de 2023 con ocho disparos de pistola mientras hacía
jogging en un parque de Krasnodar. El mes pasado un ciudadano
ucraniano fue condenado a 25 años de reclusión al ser
considerado ejecutor material del homicidio. (ANSA).