(ANSA) - QUITO, 18 NOV - Ecuador declaró el estado de
emergencia ante una cadena de grandes incendios, que el gobierno
atribuye en parte a "actos terroristas", y a la persistente
sequía, que sigue obligando a prolongados cortes de luz y
racionamientos de agua potable, lo que ha provocado disturbios
callejeros en Quito y otras ciudades.
La Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (Sngr) informó
hoy que en Ecuador están activos 17 incendios forestales, cinco
de los cuales están bajo control gracias también a la ayuda de
ocho helicópteros, dos de ellos enviados desde Perú y uno
gestionado por la embajada de Italia.
Sin embargo, la situación en las provincias sureñas de Loja
y Azuay sigue siendo grave. Casi 10 mil hectáreas de bosque ya
se han destruido desde el 1 de noviembre hasta hoy.
La ministra de Medio Ambiente y responsable de Energía, Inés
Manzano, presidenta del Comité de Operaciones de Emergencia
(Coe), confirmó la Declaratoria de Emergencia Nacional y
denunció "acciones deliberadas de algunos grupos con intereses
desestabilizadores que buscan generar ansiedad en nuestras
comunidades".
En un comunicado, el gobierno sostiene que detrás de los
últimos incendios hay "actos terroristas", que representan un
ataque contra la seguridad de las personas y el medio ambiente
por parte de quienes buscan sembrar el caos en el país.
Tres personas han sido denunciadas por estos hechos y las
fuerzas de seguridad las buscan para someterlas ante la justicia
criminal.
A la alarma de incendios se suma una intensa sequía que
provoca una reducción de los recursos hídricos disponibles para
la producción de electricidad, así como el racionamiento del
agua potable en algunas ciudades, lo que ha provocado acaloradas
protestas con enfrentamientos y barricadas en las calles.
(ANSA).