(ANSA) - MADRID, 20 NOV - El último acto de Rafael Nadal en
el tenis no fue como él y tantos otros soñaban y España cayó por
2-1 frente a Países Bajos en Málaga por los cuartos de final de
la Copa Davis y se despidió del torneo.
Un adiós que la leyenda de 38 años no merecía, pero resultó
inapelable tras su derrota en el partido que abrió la serie y la
posterior del doble "ibérico" al que no le bastó la presencia de
Carlos Alcaraz, que ganó el único duelo de la jornada para el
equipo ibérico.
No pudo ser la despedida gloriosa que el actual número tres del
ranking esperaba tributarle a su ídolo, pues Alcaraz y Marcel
Granollers dieron batalla durante dos horas y 11 minutos, pero
sucumbieron por 7-6 (7/4) y 7-6 (7/3) ante Wesley Koolhof y
Botic Van De Zandschulp.
Van de Zandschulp (80) podrá contarle algún día a sus
descendientes que le ganó el último partido de su prolífica
carrera a Nadal, vencedor de 22 títulos de Grand Slam, 14 de los
cuales los celebró en Roland Garros.
"Intenté ganar, como lo hice siempre, pero no pude. Si yo fuese
el capitán, no contaría conmigo en el próximo partido", resumía
con tristeza Nadal, tras caer por 6-4 y 6-4 en una hora y 53
minutos de juego ante Van de Zandschulp en el duelo que abrió la
serie.
"No lo digo porque no tenga ganas de jugar, sino por mi nivel de
juego. Este quizás haya sido mi último partido y se lo debo al
capitán (David Ferrer, Ndr)", resumió el legendario tenista tras
su derrota y antes de decretarse la eliminación de España.
"Si él decidió que yo debía jugar, sabíamos que era un riesgo,
pero es el capitán y yo no lo presioné en ese sentido.
Lamentablemente, no pude siquiera ganar un set, a pesar de que
me había preparado muy bien para esta serie, si no, yo mismo me
hubiese descartado", confesó.
Una velada que anticipaba otro desenlace en el adiós de Nadal,
quien no pudo contener las lágrimas de emoción cuando el
público, sus compañeros y sus rivales de turno lo ovacionaron de
pie en el Palacio de los Deportes José María Martín Carpena.
Alcaraz intentó extender el epílogo de esa existosa carrera al
derrotar a Tallon Griekspoor y dejar igualada la serie en una
hora y 25 minutos de juego, con parciales de 7-6 (7/0) y 6-3,
pero la derrota en el dobles con Granollers sentenció el
destino.
"No quiero pensar demasiado en que el rival es Nadal porque me
volvería loco", confesaba el Van de Zandschulp antes de su
victoria ante un rival que lo había superado en los dos duelos
previos que jugaron en Roland Garros y en Wimbledon en 2022.
No pudo ser ni para España, ni para Nadal, que con la "armada
ibérica" celebró cinco de las seis "Ensaladeras de Plata"
logradas hasta el momento, la primera de ellas en 2000, sin él
en el equipo y las restantes, con Nadal, en 2004, 2008 (no
estuvo frente a Argentina en la final, pero sí en el torneo),
2009, 2011 y en 2019.
El pasaje a semifinales fue para Países Bajos, que le amargó la
fiesta de despedida y espera en la próxima ronda del torneo por
el vencedor de la serie que pondrán en marcha mañana Alemania y
Canadá en este mismo escenario.
Por la otra llave lo harán el jueves Estados Unidos (32) y
Australia (28), los equipos más laureados de la historia,
mientras que ese mismo día Italia, con Jannik Sinner, número uno
del mundo, chocará con Argentina buscando dar un paso más en la
defensa del título.
Para Nadal llegó la hora del adiós tras haber participado
previamente en el flamante torneo "Six King Slam", que también
animaron en Arabia Saudita el serbio Novak Djokovic, su vencedor
en el duelo por el tercer puesto y su compatriota Alcaraz,
derrotado en la final por Sinner.
El adiós de Nadal deja a Djokovic "huérfano" de sus colegas del
"Big Three", que acapararon títulos y protagonismo en las
últimas dos décadas y que completaba el suizo Roger Federer,
quien hoy dijo presente a la distancia en la despedida del
español.
"Amigo mío, eres el orgullo del tenis. Que carrera increíble has
tenido", afirmó Federer en un sentido mensaje en el que
reconoce: "Me has hecho trabajar mucho más duro de lo que jamás
hubiera imaginado y me obligaste a reinventar mi juego, pero me
hiciste querer aún más este deporte".
"Me ganaste muchos partidos, más de los que yo logré ganarte y
me llevaste hasta un punto en el que nunca nadie pudo llevarme",
agrega la nota en le que recuerda aquel "Abierto de Australia de
2004 en el que por primera vez llegué al tope del ranking, pero
dos meses después te enfrenté en Miami, con tu musculosa roja y
me ganaste de modo convincente".
"Estábamos en el inicio de nuestro viaje y lo vivimos juntos.
Veinte años después, Rafa, quisiera decirte que has hecho algo
increíble, incluidos tus 14 títulos en Roland Garros. Hiciste
que España se sienta orgullosa y también el tenis".
El astro suizo recordó también "la Laver Cup de 2022, mi último
torneo. Para mí, significó mucho tenerte a mi lado, no como
rival, sino como pareja de dobles y compartir cancha contigo
aquella tarde y compartir mis lágrimas contigo también es uno de
los momentos que recordaré por siempre".
"Hoy, tú estás en el último capítulo de tu épica carrera.
Hablaremos cuando termines, pero ahora sólo quiero felicitarte a
tí, a tu equipo y a tu familia, que fueron claves en tus éxitos
y quiero que sepas que tu viejo amigo hará fuerza por tí ahora y
en el futuro", completa el mensaje. (ANSA).