(ANSA) - BUENOS AIRES, 10 DIC - El presidente de Argentina,
Javier Milei, cumple hoy su primer año de gobierno, marcado por
las medidas de ajuste y una agenda contra las políticas de
género y derechos humanos, aunque respaldado por el sector
empresarial y los mercados y buenos números en las encuestas.
El mandatario publicó en su cuenta de X un video que resume
su primer año de gobierno en el que asegura que "Ganó el bien".
"Ganamos con las fuerzas del Cielo", dijo el libertario, que
le asigna a su gestión una suerte de misión divina, lo que lo
lleva a impulsar una cruzada planetaria bajo el paraguas de una
"internacional de derecha" que acabe de una vez por todas "con
los zurdos".
Según su particular interpretación, con su llegada al
gobierno "ganaron las ideas libres, el poder de las redes
sociales, la lealtad para defender al líder. La revolución
tecnológica, las ideas democráticas, el triunfo de la realidad".
Milei se considera "un topo" que llegó a la Casa Rosada para
destruir desde dentro el Estado y así lo está haciendo.
El fuerte ajuste es la principal característica del gobierno
libertario, que se jacta de seguir usando la motosierra, un
símbolo de su campaña.
Se eliminaron 13 ministerios, se cerraron organismos
estatales y se recortaron presupuestos destinados a Ciencia,
Cultura y Educación, entre otras áreas.
De acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Estadística
y Censos (INDEC), casi 30 mil empleados estatales dejaron sus
cargos y, hasta octubre, eran 28 mil los que habían sido
desvinculados de sus puestos o recibido ofrecimientos de retiros
voluntarios.
El presidente se jacta de este recorte y en el Coloquio IDEA
2024 aseguró que las desvinculaciones en la Administración
Pública llegan a 50 mil.
El último recorte aplicado por el gobierno se realizó sobre
los jubilados, ya afectados por la falta de incremento en sus
haberes: se les retiró la cobertura del 100% en medicamentos.
El desempleo es una de las mayores preocupaciones de los
argentinos. Se estima que en el último trimestre del año subió
un 7,6% . Las zonas con mayor desempleo son Gran Resistencia,
Chaco (11%), Gran La Plata (9,9%) y el Conurbano, en Buenos
Aires (9,1%); Corrientes capital (8,9%); Gran Córdoba (8,2%) y
Gran Santa Fe (8,1%).
Por otro lado, un informe realizado por el Area de Empleo,
Distribución e Instituciones Laborales (EDIL) arrojó que el 36%
de los trabajadores están en la informalidad.
La licuación de los salarios (actualizados por debajo de la
inflación), provocó una dramática caída del poder adquisitivo de
los trabajadores y un aumento de la pobreza.
El índice de pobreza en Argentina en el primer semestre de
2024 fue del 52,9%, lo que representa un aumento de 12,8 puntos
porcentuales con respecto al mismo período de 2023 y se
transforma en el índice más alto en los últimos 20 años en el
país.
A esto se suma la liberación de las tarifas de servicios
básicos, como electricidad, gas, agua, cobertura médica y
telefonía, que sufrieron aumentos durante todo el año y vuelven
a ajustarse en diciembre.
Respecto del gasto, desde el Centro de Economía Política
Argentina (CEPA) y la Asociación de Presupuesto y Administración
Financiera Pública (ASAP) estiman que hubo una reducción del 30%
interanual en términos reales ajustados por inflación. La
motosierra afectó especialmente a los sectores vinculados con
obras públicas, el presupuesto destinado a las provincias,
trabajo y producción, desarrollo y asistencia social, educación
y salud pública.
El sector de la cultura también fue afectado por los
recortes. Las áreas que se encontraban dentro de este ministerio
pasaron a la órbita de una subsecretaría que depende de
Presidencia.
El gobierno intentó cerrar el Instituto de Cine y Artes
Audiovisuales (INCAA), pero la medida fue rechazada por el
Congreso. Ante este escenario, el Ejecutivo inició un proceso de
vaciamiento del organismo, que incluyó una ola de despidos y la
suspensión de la realización de películas que ya habían sido
aprobadas. También se cortó el financiamiento de festivales
cinematográficos que se llevaban adelante en todo el país y se
cerraron programas que beneficiaban a artistas, productores y
directores audiovisuales.
Políticas similares fueron aplicadas también en la
Biblioteca Nacional Mariano Moreno, el Instituto del Teatro, los
museos que dependen de la Nación y el Fondo de las Artes, todos
ellos afectados por recortes y reestructuraciones bajo la misma
línea.
Milei llega a su primer año de gobierno todavía con apoyo de
cierto sector de la población, a pesar del durísimo ajuste
fiscal implementado.
Su popularidad se mantiene en torno al 50%, a pesar de que
el país vive la peor recesión de América Latina, además de
sufrir una fuerte caída en los niveles de consumo y un notable
aumento de la pobreza.
De acuerdo al último informe de la consultora Opina
Argentina, la popularidad del libertario se situó en el 53% en
diciembre, consolidando un crecimiento de 7 puntos porcentuales
desde octubre.
Según la consultora Giacobbe & Asociados, la imagen positiva
de Milei es del 49,7%, contra un 40,8% de negativa. (ANSA).