(ANSA) - CARACAS, 13 DIC - El gobierno de Nicolás Maduro
fustigó duramente el trabajo de la Oficina del Alto Comisionado
de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH)
Volker Turk y afirma que el pronunciamiento de este funcionario
sobre la situación en Venezuela "carece de sustento y
objetividad".
"Evidencia la subordinación del Alto Comisionado a los
intereses del decadente imperio estadounidense y su uso
descarado como herramienta de agresión política contra nuestra
patria", dice el comunicado oficial divulgado por el ministerio
de Relaciones Exteriores (Cancillería).
Turk se pronunció este viernes en Ginebra en una
actualización oral sobre la situación de los Derechos Humanos en
Venezuela bajo el régimen socialista de Maduro, pidió la
liberación inmediata de cientos de presos políticos y que cese
el asedio contra la residencia de la embajada de Argentina,
donde están refugiados seis dirigentes de la oposición.
El funcionario se dijo profundamente preocupado por "el
uso desproporcionado de la fuerza y la violencia durante las
protestas electorales de julio y agosto, incluso por parte de
individuos armados que apoyan al gobierno".
En un iracundo pronunciamiento, el canciller de Venezuela,
Yván Gil, afirmó que Turk miente al acusar al gobierno de Maduro
de torturar, detener arbitrariamente y perseguir a ciudadanos.
"Denunciamos que el Alto Comisionado Volker Turk, quien
tiene las manos manchadas de sangre, producto del asesinato de
niños y niñas en Gaza, Siria y Líbano, sumiso a una agenda
imperial, pretende atacar a Venezuela repitiendo la narrativa
fabricada por la extrema derecha venezolana", argumentó la
Cancillería.
Y apuntó que que "se ha convertido a la Oficina del Alto
Comisionado de los Derechos Humanos de la ONU en espacio al
servicio de los sectores que promueven el caos, la
desestabilización y la intervención extranjera".
Una misión de la ONU, así como la Corte Penal Internacional,
investigan denuncias de supuestos crímenes de lesa humanidad en
Venezuela bajo el régimen chavista, incluyendo torturas, más de
5.000 asesinatos extrajudiciales de personas señaladas como
supuestos delincuentes, persecución de adversarios políticos,
detenciones arbitrarias y desapariciones forzosas. (ANSA).