(ANSA) - ROMA, 16 DIC - Un avión Hércules C-130 con capacidad
para 15 mil litros de agua se sumó este fin de semana a la flota
de aeronaves con que el Gobierno chileno se apresta a enfrentar
la temporada de incendios forestales, que en los últimos años ha
dejado más de un centenar de muertos y miles de hectáreas
arrasadas.
El Hércules se suma al Boeing 737 Fireliner arribado al
país hace dos semanas, y que vienen a reforzar las labores de
prevención y combate del fuego en un contrato que se prolongará
por 100 días.
El C-130 fue recibido en el aeródromo de Los Ángeles, a 500
kilómetros al sur de Santiago, y se mantendrá apostado en la
Región del Biobío.
La flota aérea de la Corporación Nacional Forestal (CONAF),
el organismo encargado de combatir los incendios, es de 77
aeronaves en total, lo que incluye las dos aeronaves recién
llegadas, otros aviones cisterna más pequeños, helicópteros, y
aviones de observación y coordinación.
El ministro de Agricultura local, Esteban Valenzuela, de
quien depende la CONAF, explicó que "aunque el Hércules no es
tan veloz, puede acceder y operar en zonas donde el Boeing no
podría, llevando la misma carga y por tanto cumpliendo con la
misma misión".
Se informó además que el Hércules C-130 tiene una
autonomía de tres horas y una capacidad de lanzamiento de 15.000
litros de agua o retardante. Se destaca por su alta
maniobrabilidad y puede volar muy lento, lo que permite operar a
menor altura y realizar descargas parciales o totales con muy
alta precisión. (ANSA).