(ANSA) - PARIS, 16 DIC - En Mayotte, el archipiélago francés
del océano Öndico donde se temen cientos de muertos tras el paso
del devastador huracán Chido el sábado último, la gente "empieza
a morir de sed y de hambre", declaró un senador del territorio a
una emisora ;;francesa.
"Hay gente enferma. La gente duerme en el suelo", dijo
Salama Ramia a BFM TV, desde una escuela de la isla transformada
en refugio. El legislador contó que los habitantes de Mayotte
todavía están en shock por el impacto del ciclón, que el sábado
trajo vientos de más de 225 km/h al archipiélago.
Sin agua, sin electricidad ni alimentos para las
numerosas víctimas, entre ellas niños y bebés, tras el paso de
brutal fenómeno meteorológico, los equipos de rescate continúan
buscando supervivientes entre los escombros de los barrios
marginales.
Chozas destruidas, tejados de hojalata arrancados, postes
eléctricos caídos, árboles arrancados de raíz. Los vecinos, que
permanecieron confinados durante el paso del ciclón,
descubrieron atónitos las escenas de caos. En todo el
territorio, muchas carreteras están intransitables y muchas
comunicaciones están cortadas.
"La emergencia es la ayuda alimentaria porque la gente no
tiene agua potable", declaró a la misma cadena de televisión un
residente de la capital de Mayotte, Mamoudzou.
Hasta el momento ha habido al menos veinte víctimas, pero
el prefecto local afirmó que el número real de muertes podría
ser mucho mayor. Sin embargo, todavía llevará tiempo tener una
imagen clara, ya que los daños generalizados a la
infraestructura, con líneas eléctricas caídas y carreteras
intransitables, están obstaculizando gravemente las operaciones
de emergencia y rescate.
Las instalaciones médicas en Mayotte están "muy
degradadas, con un hospital muy dañado y centros médicos
inoperativos", informó este lunes la ministra francesa de Salud,
Genevieve Darrieussecq, entrevistada por France 2.
"El hospital ha sufrido importantes daños, en particular
en los departamentos de cirugía, reanimación, urgencias y
maternidad, que son partes esenciales del funcionamiento del
hospital", reveló, pero añadió que, "a pesar de ello, la
estructura sigue funcionan lentamente".
El objetivo -prosiguió la funcionaria- es responder ahora
"a la afluencia de nuevos pacientes". Darrieussecq precisó que
un centenar de batas blancas de la reserva sanitaria francesa
serán enviadas "muy rápidamente" al lugar y que Paris procederá
con ''envíos masivos de material''. También está prevista la
construcción de un ''hospital de campaña''.
Los ministros dimitidos del Interior y de Ultramar, Bruno
Retailleau, y Francois-Noel Buffet, así como su colega mahorais,
Thani Mohamed-Soilihi, llegaron estelunes por la mañana al
territorio de ultramar más pobre de Francia, donde las
autoridades temen "varios centenares" de muertos, quizás "hasta
unos pocos miles".
El presidente Emmanuel Macron presidirá hoy una reunión
sobre la situación en ese archipiélago francés de ultramar,
anunció el Elíseo.
"Todos los barrios de construcciones precarias y rústicas
están en ruinas, lo que sugiere un número considerable de
víctimas", comentó a la prensa francesa una fuente cercana a las
autoridades.
Mayotte tiene oficialmente 320.000 habitantes, "pero se
estima que hay entre 100.000 y 200.000 personas más, teniendo en
cuenta la inmigración" irregular, añadió esa fuente, que calcula
que pocos habitantes sin documentación se habían incorporado a
los centros de alojamiento antes de la llegada del ciclón,
"probablemente por miedo a ser controlados". (ANSA).