(ANSA) - NUEVA YORK 21 DIC - Una mega caravana de unos 30.000
migrantes regresó a México desde Estados Unidos, a bordo de unos
7.000 vehículos desde Texas, temiendo ser duramente golpeada por
la administración entrante del presidente electo Donald Trump.
La enorme fila de coches y furgonetas, que es al menos un
300% mayor que en años anteriores, según las autoridades, se
debe a la creciente inseguridad en las rutas del norte al centro
del país, que en muchos casos están dominadas por bandas
criminales.
Líderes migrantes han advertido del calvario que representa
para muchos regresar a México para las vacaciones de Navidad con
sus familias, tanto por las extorsiones de funcionarios
aduanales y policías, como por el "acoso del crimen organizado".
Los migrantes, cargados con regalos para sus familiares,
fueron escoltados por la Guardia Nacional en varios tramos de
carreteras de los estados de Tamaulipas y Nuevo León. (ANSA).