Benedicto XVI, que sorprendió al mundo al anunciar su renuncia, considera la posibilidad de publicar un Motu Proprio sobre detalles del Cónclave que elegirá a su sucesor, dijo hoy el vocero de la Santa Sede, padre Federico Lombradi. Joseph Ratzinger "está tomando en consideración" publicar un Motu Proprio -documento de la Iglesia Católica emanado por el Papa por su propia iniciativa y autoridad- para precisar algunos puntos sobre el Cónclave, dijo Lombardi. El portavoz de la Santa Sede agregó desconocer si el Papa estimará "necesario hacer una precisión sobre la cuestión del tiempo del inicio" del cónclave. "El Papa está tomando en consideración la publicación de un Motu Proprio, en los próximos días, obviamente antes del inicio de la sede vacante", dijo Lombardi en diálogo con periodistas. "No sé si considerará necesario u oportuno hacer una aclaración sobre la cuestión del tiempo del inicio" del Cónclave, agregó. "Si y cuándo el documento será publicado, lo veremos. A mí me resultaba, por ejemplo, el estudio de algunos puntos de detalles para la plena armonización con otro documento que se refiere al Cónclave, es decir el Ordo Rituum Conclavis", comentó. "En todo caso la cuestión -precisó el director de la sala de prensa del Vaticano- depende de la evaluación del Papa y si saldrá este documento, será dado a conocer en el modo oportuno". La norma actual vigente en relación con el Cónclave establece en la constitución apostólica "Universi Dominici Gregis", que la Capilla Sixtina abra sus puertas a los electores no antes de 15-20 días después del inicio de la sede vacante tras el deceso de un pontífice. Pero ahora la situación es totalmente nueva y la renuncia de Benedicto XVI puede implicar cambios en los procedimientos. Las reglas vigentes prevén que "los cardenales presentes en Roma esperarán 15 días para la llegada de los otros. Esto puede significar que si los otros purpurados están en Roma no hay nada por esperar", explicó hoy Ambroggio Piazzoni, viceprefecto de la biblioteca apostólica vaticana. De todos modos, hasta las 19.59 locales del 28 de febrero (Joseph Ratzinger efectiviza su renuncia a las 20 de ese día), puede llegar una norma del Papa. De no ser así hasta esa hora, ya "no es más el pontífice el que decide y deciden los cardenales", explicó Piazzoni y subrayó: "hasta ese momento la interpretación de la ley la puede dar sólo el Papa". Días pasados, Lombardía no había excluido una anticipación del inicio del Cónclave, subrayando que la cuestión "fue planteada por varios cardenales". "La situación es un poco diferente de la precedente, en la cual la convocación de purpurados era hecha cuando ya la sede estaba vacante. En este caso con la comunicación de la renuncia hecha algunas semanas antes, con el anuncio del inicio de la sede vacante en anticipación, los cardenales ya son concientes y pueden prepararse a viajar a Roma con tiempo", explicó Lombardi. "Ante la eventualidad de que ya hayan llegado, no hay nada que esperar y se puede interpretar la constitución apostólica de modo diferentes", precisó.