El lector de canciones junto a iTunes cambio completamente el panorama de la industria del sector y la informática, abriendo el camino a la música líquida y streaming.
Desde 2022, la compañía de Cupertino puso fin a la producción del dispositivo, que se convirtió en un objeto para coleccionistas.
"La música forma parte de la vida de todos -explicó Jobs-.
Y como forma parte de la vida de todos, existe un gran mercado en todo el mundo". El iPod, considerado fruto del genio visionario del fundador de Apple, tiene, sin embargo, varios padres. Incluyendo a Jon Rubinstein, jefe de la división de ingeniería de hardware de Apple, que convenció a Jobs de que existía la tecnología para construir un reproductor de música portátil.
Pero también el director del proyecto, Tony Fadell, y Phil Schiller, director de marketing de Apple. La idea ganadora fue incluso la del 'click well', es decir, la rueda de desplazamiento para navegar entre menúes, listas de reproducción y canciones. En cuanto al nombre, iPod, se debe al redactor freelance francés Vinnie Chieco que se inspiró en la frase '"Open the pod bay doors. Ha!", de la película "2001: Odisea en el espacio" de Stanley Kubrick.
Después del walkman de la década de 1980, el iPod ayudó a revolucionar el disfrute de la música de paseo. Otro punto de inflexión fue el lanzamiento del iPhone en 2007, que combinaba teléfono y reproductor de música en un solo dispositivo: marcó una nueva era para la telefonía, pero también el principio del fin no solo para el iPod sino también para los demás lectores de MP3.
Un ulterior punto de inflexión se produjo más tarde con el streaming, que superó las ventas de discos físicos y descargas digitales: en lugar de tener que comprar canciones individuales, servicios como Spotify, Amazon Music y la propia Apple Music permiten elegir en cualquier momento entre un catálogo de millones de canciones, a cambio del pago de una suscripción mensual pero también sin suscripción y con publicidad.
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