Todavía hay mucho que hacer y para algunas formas de tumores los avances son más lentos, pero los datos que llegan del último informe "Los números del cáncer en Italia 2024" son esperanzadores y confirman los pasos dados gracias a la investigación.
Este año, de hecho, se estiman 390.100 los nuevos diagnósticos de tumor, unas cifras estables respecto al pasado bienio, pero casi la mitad de los enfermos, señalan los oncólogos, podrá curarse porque llegarán a tener la misma esperanza de vida de quien nunca enfermó de cáncer.
Y otro dato: disminuye la mortalidad entre los jóvenes y aumenta el número de los que viven desde hace años con un diagnóstico de cáncer, alcanzando los 3,7 millones.
Pero también está la otra cara de la moneda: el informe -fruto de la colaboración entre la asociación italiana de oncología médica AIOM y de sus entidades socias AIRTUM (asociación que estudia los tumores), PASSI (sistema de mejoras sanitarias) del Insitituto Superior de Sanidad (ISS), ONS y SIAPEC- saca a la luz la persistencia en los malos estilos de vida y la diferencia entre las regiones en cuanto a la prevención y las pruebas.
El dato positivo que seguramente sorprende es que la mitad de las personas que se enferman de cáncer en 2024 está destinada a curarse, porque tendrá la misma esperanza de vida de quien no desarrolló la enfermedad.
Para los tumores ginecológicos por ejemplo, arroja el informe que "la probabilidad de cura del tumor de útero fue del 69%. En el cáncer de mama es del 73% pero llega al 99% en la fase I y al 81% en la fase II. Los que se enfermaron de tumor de colon tienen en cambio una probabilidad de cura del 56%, del 92% en fase precoz y del 71% en fase II".
Los oncólogos señalan que es evidente el papel del diagnóstico precoz. Además, disminuyen las muertes por cáncer en la franja de jóvenes adultos entre 20 y 49 años: en 15 años (2006-2021) la mortalidad disminuyó un 21,4% en las mujeres y un 28% en los hombres, y fueron salvadas 786 vidas de mujeres y 939 de hombres.
Resulta significativa la reducción de los fallecimientos por cáncer pulmonar, que sigue siendo uno de los más mortíferos: -46,4% en las mujeres y -35,5% en los hombres.
Por tanto, subraya el presidente de la Asociación Médica Oncológica (AIOM), Massimo Di Maio, "se redimensiona la noticia lanzada meses atrás de una epidemia mundial de cáncer entre los jóvenes, que en realidad se basaba en datos epidemiológicos mundiales que no tenían en cuenta varios factores demográficos y epidemiológicos".
El tumor más diagnosticado es el cáncer de mama (53.686 casos), seguido del de colon (48.706), pulmón (44.831) y próstata (40.192).
De todas las formas, "aunque la estimación de nuevos casos de cáncer es algo inferior a la de 2022-23 -afirma Francesco Perrone, presidente del AIOMA, otra entidad oncológica- no se puede ser especialmente optimista en un escenario más general de prevalencia todavía alta de factores de riesgo de comportamiento y ambientales que contribuyen a provocar cáncer.
Se trata de una materia en la que es necesario invertir más y a varios niveles, incluido, por ejemplo, las reformas que AIOM está llevando a cabo para hacer eficaz la lucha contra el tabaquismo. Justamente sobre los estilos de vida se registran datos poco esperanzadores: el 24% de los adultos fuma, el 10% es obeso, el 18% consume alcohol en cantidades de riesgo y se registra un boom de sedentarios, de cerca el 28%.
En cuanto a las pruebas, en 2023 hubo una mayor adhesión, pero "persisten todavía notables diferencias territoriales, con las regiones meridionales que registran niveles inferiores de adhesión".
Por tanto, el objetivo, subraya el ministro de Salud de Italia, Orazio Schillaci en el prólogo del informe, debe ser "invertir en prevención, promoviendo estilos de vida sanos, a partir de una alimentación correcta combinada con actividad física. Sabemos que la mala alimentación incide en un 35% en la aparición de los tumores y que la dieta mediterránea reduce en un 10% la mortalidad. Al mismo tiempo, hay que promover la participación en programas de pruebas, fundamentales para diagnosticar precozmente una patología y aumentar notablemente las posibilidades de cura".
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